Tras el aval a la LOMLOE del Tribunal Constitucional, en fecha de 18 de abril de 2023, desde ANCEE queremos expresar lo siguiente: apoyados en el estado democrático de derecho en el que nos encontramos, con la misma fuerza con la que respetamos los dictámenes del poder judicial, también nos pronunciamos desde la libre expresión en defensa de colectivos vulnerables y potencialmente afectados.
De este modo, detectando que la 'Ley Celaá' está generando una disensión sin precedentes en la nuestra democracia, en gran medida provocada por la ausencia de unos mínimos planteamientos de consenso, a través de los que se debería haber escuchado a todos los sectores implicados y corresponsables, en la misma, desde nuestro ámbito de actuación, nos vemos obligados a reafirmar la necesidad de la existencia, mantenimiento y potenciación de la educación especial porque:
La Educación Especial acoge actualmente a menos de un 18% del alumnado con necesidades educativas especiales, siendo el 82% restando integrado en la modalidad ordinaria. Así, la inmensa mayoría de este alumnado, entre el que encontramos discentes con discapacidad, ya están en centros ordinarios, lo cual, en muchas ocasiones, se acompaña con dificultades añadidas para los docentes, para las cuales, no siempre se siente dotados y apoyados. De todos modos, esto nunca es cuestión de número, sino de asignar con criterios objetivos el mejor contexto para cada alumno en un momento dado de su proceso educativo
La Educación Especial es solicitada y demandada por multitud de familias, basadas exclusivamente en la eficacia que experimentan desde esta modalidad educativa respecto de sus hijos, y, desde ahí, intentan preservar el bien superior del menor.
La Educación Especial en España está altamente especializada, mediante un trabajo interdisciplinar que contempla y aborda la intervención desde las distintas dimensiones que integran a la persona.
La Educación Especial desarrolla su labor con énfasis profundo en la personalización de la educación, adaptándose a la idiosincrasia de su alumnado, procurando potenciar a cada alumno en función de sus capacidades y limitaciones.
La Educación Especial está estructurada de modo poliédrico, respecto de sus distintos centros, en consonancia con la heterogeneidad de su alumnado, conscientes de los distintos grados de afectación y diversidad funcional.
La Educación Especial es absolutamente inclusiva, desde una visión abierta y adaptativa, que entiende el proceso educativo como una etapa transitoria que mira al mayor grado futuro de integración social y laboral; como hace todo modelo educativo.
La Educación Especial es compatible con los modelos ordinario y combinado, pudiendo ser todos ellos transitados por un mismo alumnado dado, a partir de la mejor opción en cada momento educativo determinado.
La Educación Especial se basa en fundamentos pedagógicos y científicos, libre de condicionantes y sesgos ideológicos.
Por todo ello, apoyados tanto en criterios de evidencia como en el testimonio de todas las personas afectadas -especialmente, el alumnado y sus familias-, pediríamos ese "patrón de equilibrio" explicitado por el Tribunal Constitucional respecto a la coexistencia lingüística en las comunidades autónomas, en aras a seguir contando con nuestras actuales modalidades educativas, que, de modo coordinado y complementario, tanto fruto llevan años cosechando en nuestra sociedad.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios