Chicos, extranjeros y en situación de vulnerabilidad: así son los estudiantes que más abandonan 4º de la ESO en Cataluña

Un estudio de la Fundación Bofill muestra las desigualdades educativas en la transición a estudios postobligatorios tras acabar 4º de la ESO. El informe, que se ha presentado este jueves, indica que el perfil mayoritario que más abandona los estudios una vez finaliza la etapa obligatoria son los chicos, de origen extranjero y en situación de vulnerabilidad. En Cataluña, el 86,3% de los jóvenes con 17 años están escolarizados, una cifra cuatro puntos por debajo de la media de España, que es del 90%.

Los datos indican que el abandono escolar prematuro –de estudiantes entre 18 y 24 años- es de un 17% en tierras catalanas, mientras que en gran parte de países europeos se sitúa por debajo del 10%. Este abandono se realiza generalmente en la etapa de la ESO, sobre todo en el cuarto curso. En 2019-2020, cerca de 5.500 alumnos que se graduaron no iniciaron cursos postobligatorios como Bachillerato o Ciclos Formativos. “La gran mayoría dejan de estudiar porque no tienen apoyo”, afirma Ismael Palacín, director de la Fundació Bofill.

En cuanto al perfil del estudiante que abandona, el informe indica que el alumnado en situaciones vulnerables roza el 30% del abandono escolar, mientras que aquellos que la cifra de los que no viven en situaciones de vulnerabilidad es del 10%. En cuanto al sexo, los hombres dejan los estudios tras finalizar la ESO 1,4 veces más que las mujeres y más en caso de ser extranjeros. En cuanto a las chicas, aunque su índice es menor al de los hombres, sí que se distinguen entre las extranjeras y las nativas, con cifras de abandono de 21,2% y 8,4%, respectivamente.

En los centros CMC, 1 de cada 4 abandona los estudios

El informe también señala que el abandono se acentúa en los Centros de Máxima Complejidad (CMC), donde 1 de cada 4 alumnos no continúa con sus estudios tras finalizar la ESO, hecho que provoca que el 71% de estos centros tengan niveles muy altos de abandono escolar prematuro. La Fundación Bofill detalla que el 25% de los centros CMC acumula el 50% de los alumnos que no transitan hacia cursos postobligatorios en Cataluña. En 2020, de los 1.052 centros educativos de Cataluña, 300 registraron cifras de abandono por encima del 15%.

Desde la Fundación aseguran que la transición de la etapa obligatoria a la postobligatoria es uno de los momentos más determinantes de la trayectoria educativa de los jóvenes y que el abandono en esta etapa supone un proceso de desvinculación escolar que dificulta que estos alumnos puedan volver a reengancharse más tarde al sistema educativo.

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Es por eso que, además de presentar estos datos, señalan algunas de las medidas imprescindibles que se deberían tomar para evitar que esta cifra siga creciendo e intentar reducirla. 

Entre ellas está la realización de planes individualizados de orientación educativa y acompañamiento durante la transición escolar en todos los centros de secundaria, la ampliación de los dispositivos de educación inclusiva en la educación postobligatoria y la reducción de los niveles de segregación del alumnado que abandona cuarto de la ESO en determinados centros.