Un tercio de los nacidos en España en 2021 eran de padre o madre extranjeros

Casi un tercio de los bebés que nacieron en España en 2021 (el 32,4%) tenía al menos un padre o madre extranjero, llegando a rozar o incluso superarse el umbral del 40% en provincias como Madrid, Barcelona o Guadalajara. Un escenario que se explica en gran parte por el notable aumento de población inmigrante que se ha ido experimentando en las últimas décadas y que se traduce en un crecimiento de seis millones y medio de extranjeros nativos más residiendo en España respecto a hace 25 años.

Se trata, según subraya el Observatorio Demográfico de la Universidad CEU San Pablo en su último informe, de un "cambio demográfico sin precedentes" que ha provocado que, en menos de treinta años, una quinta parte de la población española sea inmigrante. Así, el estudio Inmigración: un quinto de la España actual, más de un cuarto de la futura hace un repaso sobre la población foránea que reside en España y analiza sus particularidades según territorios, país de origen, pautas de fecundidad y comparativa con los españoles. 

La magnitud es tal que la edad promedio de los nativos de España subiría casi dos años de no ser por los hijos inmigrantes nacidos aquí. La investigación habla de una "transformación sociodemográfica histórica", también por el corto periodo de tiempo en el que se ha producido. Y es que, en cuestión de décadas, las siete ciudades españolas más pobladas han visto cómo su población autóctona decrecía un 17% (1,2 millones de nativos españoles menos), sustituida por la foránea. 

Un fenómeno que, según el Observatorio, responde en parte a un mayor número de muertes que de nacimientos, pero "sobre todo" a la marcha de población a otros lugares (otros municipios, otras provincias o al extranjero). 

Más población extranjera en las grandes ciudades

Barcelona, Bilbao Madrid y Valencia son las ciudades que, con diferencia, han visto cómo su población extranjera aumentaba en mayor grado. La ciudad condal, por ejemplo, ha perdido 384.000 españoles autóctonos desde 1996 hasta 2022 (-26%), pero ha ganado 511.000 nuevos ciudadanos inmigrantes. El 46% de los bebés nacidos en Barcelona en 2021 son de madres nacidas en el extranjero. 

En Madrid, más de uno de cada cuatro niños alumbrados en ese mismo año tenían una madre extranjera (con o sin nacionalidad), después de haber visto cómo su población extranjera aumentaba en 844.000 personas desde 1996, al contrario que su autóctona, que se redujo un 16% en ese mismo periodo (-430.000 habitantes). 

También en Valencia perdieron una cantidad importante de población nacida en España con padres españoles (un 19% menos, esto es, 67.000 españoles autóctonos menos); frente a los 170.000 nuevos extranjeros que han propiciado que el 31,6% de los bebés nacidos en 2021 tuvieran una madre de otro país. 

Algo parecido ocurre en Bilbao (que en 1996 sí que estaba entre las 7 ciudades más pobladas del país), donde en las últimas décadas los habitantes nacidos en España y de padres españoles se redujo un 19% (-67.000 habitantes), y casi tres de cada diez bebés nacidos en la localidad vasca (el 28,9%) tienen una madre extranjera. Le siguen Zaragoza, Sevilla y Málaga, que también han perdido entre 80.000 y 40.000 habitantes nacidos en España, sustituidos con entre 117.000 y 64.000 nuevos inmigrantes. 

A nivel nacional, más de una cuarta parte (el 27,5%) de los bebés nacidos en los últimos años son de una mujer nacida en el extranjero, con varias comunidades que superan el 30%. Lideran el ranking Cataluña (39,4%), Baleares (37,3%), La Rioja (35,2%), Navarra (33,4%) y Madrid (33,3%).

Por origen de la madre, la mayor parte (el 42%) eran americanas nativas, el 28% africanas (el 80% de las cuales, marroquíes), 22% europeas (sobre todo de Europa oriental y Rumanía), y un 7% asiáticas (especialmente pakistaníes).

La mitad de los nacidos en Girona tiene padres foráneos

Pero la tendencia se intensifica contando al padre y a la madre: el 32,4% de los niños nacidos en 2021 tenían al menos un progenitor de origen foráneo, superándose el umbral del 50% en la provincia de Girona (50,9%). También Lérida registró una proporción alta (del 45,2%), junto a Barcelona y Baleares, donde el 45% de los nacidos tenían un padre o una madre de un país extranjero. En Madrid el porcentaje es del 39% y en Valencia del 31%. 

En general, el estudio destaca cómo esa tendencia creciente de la población migrante en las últimas décadas ha ido de la mano de una transformación del perfil habitual que viene a vivir a España. Si hace casi treinta años los europeos occidentales eran la comunidad extranjera más numerosa, esta ha sido desbancada por los ciudadanos hispanoamericanos, africanos y asiáticos. 

Marruecos es ya el que aporta más nacidos fuera del país; aunque por regiones, y desde mediados de 2015, la comunidad extranjera que más ha crecido es la iberoamericana, seguida de la africana y la asiática (con la población china y pakistaní a la cabeza). Por países, después de los migrantes de origen marroquí, los más numerosos son los colombianos, seguidos de los rumanos, ecuatorianos, venezolanos, argentinos, británicos, peruanos, franceses y chinos.

Hacia comunidades "más pujantes"

"La inmigración va mucho más a las comunidades autónomas más pujantes y/o menos envejecidas que a las que tienen el perfil opuesto", señala la investigación. Territorios como Baleares, Cataluña, Madrid y la Comunidad Valenciana son los que más población extranjera reciben; frente a Extremadura, Asturias, Castilla y León o Galicia, que son las que menos. 

Aquí, de nuevo, hay diferencias según la comunidad. En casi todas, los habitantes procedentes de América representan el grupo más numeroso, pero la pauta cambia en algunos territorios, como en la Comunidad Valenciana y Andalucía, donde los europeos en edad de jubilación son el grupo foráneo más numeroso.