El 'disputado voto del señor Rodríguez': el expresidente decidirá quién gobierna, los que le piden cárcel o los que lo echaron del partido

La vida da muchas vueltas, y la política más, incluso de manera rocambolesca. La resaca electoral ha traído una doble alegría para el alcalde de Ontinyent (Valencia), Jorge Rodríguez: la primera fue la reválida de su mayoría absoluta como primer edil con su partido, Ens Uneix, el que fundó tras ser expulsado del PSPV-PSOE a raíz del caso Alquería, por el que fue detenido hace cinco años acusado de presuntas contrataciones irregulares en la empresa pública de la Diputación de Valencia, institución que entonces presidía. La segunda, su absolución de todos los delitos, que ha llegado este martes junto a la de los otros 13 procesados. Curiosamente, la formación de Rodríguez tendrá además, si el recuento se confirma, la llave de la Corporación provincial que presidió durante tres años: podrá dársela al PSPV, el partido que lo expulsó, y conformar así el principal reducto socialista tras la arrolladora victoria del PP en la Comunitat Valenciana; o a los populares, que han sido acusación durante el juicio y pedían prisión para él.

El partido de Rodríguez se convierte así, en árbitro de la gobernabilidad en la institución provincial, la única que podría conservar la izquierda tras confirmar el PP la de Alicante y perder también la de Castellón, además de la Generalitat, las tres capitales de provincia y Elche (la tercera ciudad más poblada de la autonomía). 

Con el 99,97% escrutado, la página oficial del Ministerio del Interior refleja que, en la derecha, el PP ha obtenido 13 diputados y Vox 2; mientras que, en la izquierda, el PSPV tiene 12 y Compromís, 3. Ese diputado de Ens Uneix por el partido judicial de Ontinyent (que ha bailado con el PP por solo 14 votos), por tanto, decantará el gobierno hacia uno u otro lado ante el empate a 15 diputados.

Desde la formación independiente aseguran que lo primero es esperar la confirmación de su acta, que en la parte final de legislatura recién concluida ha ocupado Natalia Enguix, ya que el recuento ha dado varios vuelcos desde el domingo por la noche. En segundo lugar, intentarán llegar a un acuerdo con "quienes sean más sensibles" a sus demandas.

Ahora bien, ¿cuáles serán esas demandas? Si cristaliza el actual escenario, la formación local encarará la negociación doblemente reforzada: por un lado, por su papel clave y su posición de fuerza para desequilibrar la balanza y, por otro, impulsado por la rehabilitación política de la figura de Rodríguez. En las últimas horas se ha llegado incluso a especular con que Ens Uneix pueda llegar a reclamar la Presidencia de la Diputación. 

En cualquier caso, ya se han producido algunos cantos de sirena desde el PSPV, con mensajes públicos de alcaldes socialistas como el de Mislata, Carlos Fernández Bielsa, actual vicepresidente de la Diputación y cuyo nombre suena como posible presidente, o el de Cullera, Jordi Mayor, en su día cercanos a Rodríguez.

La absolución de Rodríguez tendrá su peso en la negociación. Según recuerdan desde Ens Uneix, el PSPV, con Ximo Puig a la cabeza, es el partido que "no tuvo piedad", los "expulsó" y quiso "acabar con ellos", mientras que el PP es el que quiere meterlos "en la prisión" y a la vez "pide pactar".

El propio PSPV emitió este martes un comunicado en el que celebró la absolución de Rodríguez y el resto de acusados: "La Justicia ha demostrado su honorabilidad", apuntaron desde el partido que lidera Puig. El propio secretario general socialista también mostró su satisfacción y añadió que "siempre creyó" en Jorge Rodríguez, si bien considera que no cree que deban "pedir ninguna disculpa".

Desde el punto de vista ideológico, Ens Uneix viene del socialismo, por lo que se define "como gente progresista que está en contra de las ideas de la ultraderecha". "Seremos profesionales", aseveran estas fuentes, que insisten en que en su prioridad es confirmar el diputado e "intentar llegar a un acuerdo con quien sea más sensible" a sus demandas, pensando "en el bienestar de los ciudadanos" y, especialmente, en los de Ontinyent y la comarca a la que representan, la Vall d'Albaida, al sur de la provincia de Valencia. 

La pelota, en el tejado del expresidente

La pelota vuelve pues, cinco años después de su detención, dimisión y defenestración política, al tejado del expresidente Jorge Rodríguez. De su partido dependerá que la izquierda conserve una institución con 646 millones de euros, saneada, que influye con ayudas en los ayuntamientos (especialmente en los más pequeños), y que mantenga una figura política que dé presencia y proyección de futuros liderazgos a los socialistas. O, por el contrario, que la "marea azul" desatada el 28-M en la Comunitat Valenciana se complete del todo.