Madrid

Sanz, la vicealcaldesa 'inmaculada': "Tiene Cibeles en la cabeza. Nunca patina"

Ilustración de la portavoz municipal y delegada de Seguridad y Emergencias en funciones, Inmaculada Sanz.
Carlos G. Kindelan

Es rutina cada jueves desde hace cuatro años. Al filo de las 11.00 horas, se encienden los micrófonos en sala de prensa del Ayuntamiento de Madrid; los periodistas esperan con la pluma en ristre; las cámaras ajustan sus objetivos y ella aparece, a veces acompañada, para dar parte de los acuerdos alcanzados en la Junta del Gobierno municipal y rendir cuentas por la gestión del equipo de Almeida. Ruidos, cantones de limpieza, movilidad... da igual lo que echen, la portavoz municipal responde a todo con franqueza y seguridad, Área, por cierto, que también gestiona. "Tiene Cibeles en la cabeza y si no sabe algo lo reconoce. Nunca patina", dice su círculo. El próximo 17 de junio Inmaculada Sanz (Zamora, 1997) tendrá una nueva ocupación: ser la vicealcaldesa de la capital. 

Lo confirmó este jueves el alcalde de Madrid en funciones, José Luis Martínez- Almeida, quien ya aireó hace algunas semanas los planes que tenía para la número dos en su lista. "Es una persona de mi absoluta confianza y de extraordinaria valía, con la que llevo trabajando desde hace 14 años", deslizó entonces. A ella le confió la dirección de su campaña en las elecciones del 28 de mayo, igual que en 2019, cuando, también en palabras del regidor, "obró el milagro" de llevarle a la Alcaldía Madrid, pese a haber obtenido los peores resultados del PP en unas municipales. En este último mes, su implicación ha sido incansable. "Cerraba actos, decía cuándo y dónde dar los mensajes, revisaba el programa... Lo pilotaba todo", comentan otras fuentes municipales. El premio ha sido aún más goloso: la mayoría absoluta.

La historia de Inmaculada Sanz es la de una mujer "trabajadora", "organizada" y "hecha así misma" tras muchos años dando "pasitos" en el Partido Popular, donde se afilió nada más cumplir la mayoría de edad. Fiel seguidora de la filosofía del partido a partido del Atlético de Madrid, querencia compartida con su jefe Almeida, Sanz "empezó embuchando sobres, haciendo trabajo de sede y fue poco a poco subiendo" hasta acumular casi dos décadas de responsabilidades públicas. Antes de adentrarse de lleno en política, trabajó como monitoria de tiempo libre durante algunos años de su juventud y se licenció en Administraciones y Dirección de Empresas por la Universidad Autónoma de Madrid (UAM).

Por entonces conoció a Isabel Díaz Ayuso, a la postre presidenta de la Comunidad de Madrid, con la que todavía hoy goza de "buena relación". Corría el año 2005, la época de mayor hegemonía para los populares en la capital de España. Y la zamorana hizo de todo: jefa de gabinete de la consejera de Familia y Asuntos Sociales (2005-2006); directora general de Coordinación de la Dependencia (2006-2007); de gabinete de la Vicepresidencia de la Comunidad de Madrid (2007-2008); directora general de Relaciones con la Asamblea de Madrid (2008-2015)... hasta que en 2015, salto al ruedo parlamentario, engrosando las listas de la candidatura al Ayuntamiento que encabezó Esperanza Aguirre.

Durante esa primera legislatura, con Manuela Carmena como alcaldesa, Sanz evaluó con dureza la gestión del, a la sazón, delegado de Seguridad, Javier Barbero. Seguramente no imaginaba que en solo un cuatrienio ella sería quien velaría por la seguridad de los madrileños. 

"365 días en alerta"

No ha sido una legislatura sencilla para el PP de Almeida, en coalición con Ciudadanos desde 2019. Menos aún, en el ámbito de la seguridad. La época del Covid, la borrasca de Filomena, la escalada de violencia de las bandas juveniles..."Había que estar alerta los 365 días del año, cada día pasaba algo", señalan sus más cercanos. Y la delegada de Seguridad se mantuvo siempre al pie del cañón. "Dime solo un error", retan desde su equipo al mirar atrás. "Es muy, muy solvente. Si yo fuera alcalde, también la elegiría", coinciden varios miembros. 

Pero ser la voz del Consistorio en momentos tan complicados no es tarea fácil. Sanz reconoció en su última entrevista con 20minutos que los mensajes de los bomberos en las residencias de mayores durante el confinamiento o "esos días del Palacio de hielo", donde la pista de Hortaleza sirvió como morgue improvisada para albergar los cadáveres de miles de fallecidos por el coronavirus, pasaron factura. "Al final, las noticias más complicadas de dar son las que afectan a las personas. En lo político, se relativiza más".

Madre de dos hijos, buena jugadora de pádel y amante de la naturaleza, y de su siempre recurrido Lago Sanabria, 'Inma' -como la conocen en los mentideros de Cibeles- es una persona cercana y accesible, presta siempre a los corrillos de prensa. Aunque, a la hora de trabajar, mantiene un perfil serio y prudente. El mismo con el que posiblemente ejerza la Vicealcaldía, hasta ahora en manos de la líder naranja Begoña Villacís. Mucho menos mediática que su predecesora, Sanz podría ocupar también alguna otra Área de Gobierno, si bien el alcalde Almeida todavía no ha decidido cuál será la configuración de su próximo ejecutivo. 

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