El caso de Andrew Tate contra la justicia rumana se complica: aumentan sus cargos a "tráfico de personas continuado"

Los fiscales de Rumanía han dado una nueva actualización sobre el caso de Andrew Tate y su hermano este pasado martes y han anunciado que les están investigando por un cargo mucho más grave que el que se les imputaba inicialmente. 

El polémico influencer ahora se enfrenta a la acusación de "trata de seres humanos de manera continuada", aseguraron en la rueda de prensa, junto con su hermano Tristan y dos mujeres más. 

El portavoz de DICOTT, la agencia contra la delincuencia organizada, también aseguró que una nueva víctima se había unido al caso, que ya contaba con seis mujeres de testigo. 

Los sospechosos continúan negando todas las acusaciones, incluidas las de qué presunta violación y la de formación criminal para explotar a mujeres. Una postura que defienden desde que fueron puestos bajo custodia el pasado mes de diciembre. 

Desde el 31 de marzo, los cuatro criminales se encuentran bajo arresto domiciliario a la espera de que continúa la investigación y el caso llegue a juicio. Se espera que los fiscales los procesen a finales de junio. 

Los abogados de Tate, por otra parte, aseguraban que era de su "interés legal" este cambio en los cargos para "garantizar que se mantiene una investigación imparcial". 

Además, el caso se ha extendido hasta Vlad Obuzic, un hombre rumano cercano a los hermanos Tate, que también ha sido acusado de trata de seres humanos y de intentar aprovecharse de mujeres fingiendo querer mantener una relación con ellas para después coaccionarlas a que hicieran porno. 

En Twitter, Tate no se mostraba molesto con este cambio, repitiendo la defensa de que "no tienen ninguna prueba": "Necesitaban hacer esto para acusarme con un expediente tan débil. No pueden dejarlo ahora, imaginaros el revuelo".