Bárbara Rey ha decidido romper su silencio ante la acusación contra ella y sus hijos, Ángel y Sofía Cristo, por un presunto delito de alzamiento de bienes que trascendió el pasado viernes, comenzando por desmentir la razón detrás del retraso de la celebración del juicio, el cual estaba previsto para este lunes.
"No hay ningún familiar en paradero desconocido. Eso no es cierto", ha comenzado diciendo ante los micrófonos de EuropaPress, a quienes fuentes jurídicas afirmaron que ese era el motivo del aplazamiento. Asimismo, ha añadido que pronto habrá una respuesta conjunta de toda su familia, porque de hecho no sienten presión alguna.
"Tanto mis hijos como yo estamos muy tranquilos. No puedo hablar porque es un tema que está en manos de los tribunales. Esta semana se emitirá un comunicado", ha dicho Rey, que finalmente ha explicado que desconoce la razón por la que esto ha visto la luz justo en estos momentos.
"Es algo que lleva mucho tiempo, no sé porque ha salido ahora. Llevamos años con esta historia que no tiene sentido", ha inquirido la antigua vedete, preguntándose si no será por el enorme revuelo mediático que conlleva que su nombre esté ligado a una noticia de este calibre.
"Cualquier cosa que sale con mi nombre tiene una repercusión que no te quiero ni contar", ha agregado, reiterando además que ella no tiene "la menor preocupación" y que desde algunos medios "se están diciendo muchas cosas que no corresponden". "Las cosas se solucionarán", ha dicho Bárbara.
Por último, ha ironizado sobre una posible entrada en prisión —"una temporada viviendo gratis", ha bromeado—, dado que la Fiscalía de Madrid ha solicitado más de tres años de prisión para María Margarita García García, su verdadero nombre, así como dos años y medio para sus hijos por presunta colaboración.
El presunto alzamiento de bienes se debería a una serie de operaciones financieras que acabaron provocando "una situación de indefensión económica" que le impedía a Bárbara Rey hacer frente al pago de 143.902,24 euros que le era reclamado por la Agencia Tributaria. En dichas operaciones de carácter crematístico habrían participado presuntamente Sofía y Ángel Cristo.
"[Esto] No tenía que haber sucedido, pero como en esta país no pasa nunca nada, no tenían otra cosa que hacer", ha finalizado.
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