Mar Flores vuelve con Elías Sacal tras la sentencia a su hijo, Carlo Costanzia

El año pasado, cuando dieron a conocer su ruptura —la cual era la tercera vez que decidían separarse—, hablaron de "cese definitivo". Es decir, que ya no habría nuevas reconciliaciones. Pero el amor todo lo puede, están siendo unas semanas muy complicadas y donde dije digo... Mar Flores y Elías Sacal se han vuelto a dar una nueva oportunidad.

Tal y como han dado a conocer en exclusiva este miércoles desde la revista Diez Minutos, la modelo madrileña y el empresario mexicano, de 54 y 56 años respectivamente, han regresado de nuevo como pareja y han decidido pasar unos días de vacaciones juntos en la localidad francesa de Saint Tropez.

Flores y Sacal se han marchado a la costa francesa en mitad de todo el revuelo mediático que ha supuesto para ella la condena a 21 meses de prisión de su primogénito, Carlo Costanzia, quien además tendrá que entrar en prisión por un delito continuado de estafa agravada. Con toda probabilidad estos días en el país galo le ayudarán a reducir el impacto del mal trago y, al menos, alejarse del continuado goteo de noticias sobre su hijo.

"Ya toda la vida me voy a quedar sola", dijo la modelo en el verano de 2022 hablando de su ultima separación con el empresario. Sin embargo, la necesidad de tener un hombro sobre el que llorar quizá haya sido una de las razones para que retomen su amor, así como por el bien de sus otros hijos, Mauro, Bruno, Darío y Beltrán, frutos de su segundo matrimonio, con Javier Merino.

Sobre todo, teniendo en cuenta las palabras que la propia Mar Flores le dijo a Sonsoles Ónega apenas unos días antes de marcharse al litoral francés. "Intento estar segura y fuerte porque tengo otros cuatro hijos a los que quiero poder transmitir paz, serenidad y fortaleza", aseguró en aquel momento, si bien es cierto que las últimas declaraciones de Carlo Costanzia no habrán ayudado.

Y es que el actor de 31 años ha reconocido que lleva casi toda su vida con problemas de adicciones, comenzando por tomar antidepresivos a los seis años. "A los diez bebía alcohol. Después, llegó el tabaco y luego el hachís. En la adolescencia llegué a tocar fondo", confesaba para Lecturas, así como que ha estado en una clínica de desintoxicación y que lleva ocho años en terapia.