Meritxell Batet: "El PP ha tomado los modos y las políticas que hasta ahora se relacionaban con la extrema derecha"

¿Un buen resultado en Cataluña puede provocar un vuelco de los pronósticos actuales?Yo creo que Cataluña es crucial en estas elecciones. Hay solo dos posibilidades, es decir, que lleguen dos personas a ser presidentes del Gobierno. O bien Pedro Sánchez, o bien Feijóo, y desde luego, el número de diputados que nosotros podemos sacar va a ser determinante.

¿Y cree que se va a dar esa situación?Estoy convencida de que Cataluña y las mujeres podemos bloquear a la derecha, y que en Cataluña no solo ganemos las elecciones, sino que haya un resultado muy holgado y una gran diferencia respecto al PP.

Los datos económicos y sociales de esta legislatura no eran malos. Por tanto, ¿que está castigando al Partido Socialista?Esta legislatura ha sido muy complicada. Hemos tenido dos crisis internacionales, la pandemia y una guerra en suelo europeo. El Gobierno ha sido capaz de tomar medidas de urgencia excepcionales para frenar los efectos negativos de estas crisis y creo que ha sido bastante eficaz. Hemos sido capaces de preservar el tejido empresarial, y sobre todo, a los trabajadores y al trabajo.

¿Y entonces?Ha sido una legislatura con un exceso de ruido que no te permite espacios para hablar de contenidos, para hablar de políticas, para hablar de las más de 200 leyes que hemos aprobado. Ha sido una legislatura donde se ha aprovechado el tiempo para también hacer reformas estructurales importantísimas que llevábamos muchísimo tiempo necesitando.

¿Cree que esas reformas tendrían que darles más réditos electorales?Hemos cambiado el mercado laboral de este país con una reforma laboral que está produciendo en estos momentos más contratos indefinidos que nunca. La subida del salario mínimo interprofesional ha sido histórica y también es una reforma estructural. Conseguir articular un sistema de pensiones sólido, sostenible en el tiempo y que se revalorice con el IPC es otra reforma estructural. Como decía, son más de 200 leyes y en todas ellas tenemos respuestas a demandas sociales y conquistas de derechos que mejoran la vida de los ciudadanos, que en definitiva es lo que creo que tenemos que hacer quienes nos dedicamos al servicio público.

Hablando de reformas, la del Código Penal, eliminando la sedición, y los indultos a independentistas ¿están lastrando al PSOE en el resto de España?Yo fui precisamente ministra de Política Territorial cuando llegamos al Gobierno en 2017, y entonces había la mayor crisis territorial en la historia de de nuestro país. Hoy podemos decir que Cataluña, y por tanto España, está infinitamente mejor que en 2017, gracias a la valentía y al proyecto político de un presidente del Gobierno que cree en la generación de convivencia de todos los pueblos de España.

Desde la derecha se propone acabar con todas estas reformas y derogar casi todas las leyes que han aprobado.Es curiosa esta esta campaña electoral, porque hay un partido cuyo único programa electoral es la derogación de de todo lo conquistado, y creo que es muy mal programa. Me parece una ausencia de programa electoral, auqnue a eso ya estamos acostumbrados. Además, el Partido Popular nunca ha tenido tampoco programa para Cataluña y por eso hemos sufrido cuando han gobernado, especialmente en Cataluña.

Usted ha sido muy crítica con la campaña de Feijóo, pero incluso después del ‘Cara a Cara’ del lunes, lo está siendo más.Creo que es el Partido Popular sin tapujos, sin esconderse, digamos. Lo que ha hecho ha sido tomar los modos y las políticas que hasta ahora se relacionaban con la extrema derecha. Por eso, el problema no es solo Vox. El problema es que un partido supuestamente de Estado tome los postulados de Vox. Creo que en el debate, vimos el peor Partido Popular, utilizando impunemente la mentira como arma política.

Le acusa incluso de tácticas trumpistas.El señor Feijóo practica tácticas trumpistas con mentiras y bulos, por ejemplo, al cuestionar el sistema democrático y señalar a los trabajadores de Correos. Pero los socialistas vamos a parar esta barbaridad. España se merece un presidente que respete a los españoles, un presidente con principios y que nos diga la verdad.

En este sentido, como presidenta del Congreso ha vivido situaciones complicadas con la bancada de Vox. ¿Cómo ve el futuro?El futuro lo veo optimista porque estoy convencida de que vamos a ganar estas elecciones. Lo creo firmementeporque salgo a ganar estas elecciones. Además, necesitamos 4 años más de presidente Sánchez para consolidar todas las conquistas que hemos conseguido en esta legislatura.

En ese objetivo, otorga un papel especial a las mujeres.Creo que las mujeres tenemos que tener una sensibilidad especial, sobre todo después de oír y ver lo que hemos visto en las últimas semanas. Tenemos que dar el do de pecho y tener un papel crucial para conseguir que Pedro Sánchez vuelva a ser el Presidente del Gobierno.

Aunque igual que en 2017, necesitarán más apoyos que el de Sumar, y uno de los han tenido hasta ahora, Esquerra Republicana, no parece estar por la labor.Quiero trasladar y dejar muy claro que en estas elecciones no solo se trata de contraponer posiciones partidistas. Hay cosas que no tienen precio. La igualdad entre mujeres y hombres no tiene precio. La convivencia en Cataluña no tiene precio. Revalorizar las pensiones y que nuestra gente mayor pueda estar tranquila de que el sistema es sostenible, no tiene precio. Y, por tanto, me parece errónea la aproximación que hacen algunos partidos.

Ante la falta de inversiones, se vuelve a hablar de la necesidad de un nuevo pacto de financiación para Cataluña.Sin duda, urge abordar el sistema de financiación, pero, con toda claridad, las inversiones en Cataluña se han quintuplicado en este mandato. Es decir, el último Gobierno de Rajoy invertia 5 veces menos que el Gobierno de Pedro Sánchez. Además, hoy tenemos un Gobierno en España que tiene la voluntad de invertir, y de invertir en Cataluña también. Y la voluntad de llegar a acuerdos para canalizar esa inversión.

En Rodalies, no se nota que se quintupliquen las inversiones.Por desgracia, las inversiones son más lentas que la redacción de un tuit. Necesitas tiempo, pero se están ejecutando de una manera mucho más ambiciosa porque creemos en ello, tenemos un proyecto y tenemos un plan.

¿Hay que traspasar Rodalies a la Generalitat? Yo creo que la solución es invertir y gestionar bien. La capacidad de gestión del Gobierno de España está más que acreditada. También ha quedado más que acreditada que la Generalitat tampoco gestiona demasiado bien algunas de sus competencias. Estoy pensando en la convocatoria de oposiciones. O en las energías renovables,porque estamos a la cola. La producción energética de renovables en Cataluña es del 17%. En Aragón es del 70% y la media en España es del 39%.

La principal queja sobre las inversiones es que no es un problema de hace muchos años.Venimos de siete años de gobierno del Partido Popular donde, tanto al gobierno de España como al de Cataluña, no les interesaba invertir ni ponerse de acuerdo. Y eso lo estamos pagando todavía. Cuando hay dos gobiernos que no se hablan, que no se reúnen, que no pactan, a uno ya le va bien porque utiliza a Cataluña para hacer campaña en el resto de España y el otro lo utiliza para presentarse como la víctima maltratada por España y alimentar así a su electorado.

Con ustedes hubo una Mesa de Diálogo.Creo que Pedro Sánchez ha demostrado en primera persona, y todo el Partido Socialista, pero él en primera persona, cómo ha apostado por el diálogo durante esta legislatura. Y creo que ha funcionado muy bien. Recuerdo en el año 2017 como estábamos, cuál era el clima, cómo eran las relaciones en nuestros centros de trabajo con nuestros amigos familiares. Eso se ha revertido y hemos conseguido normalizar las calles, normalizar la sociedad y, sobre todo, conseguir un diálogo fluido y permanente a nivel institucional y a nivel de administraciones.

Pero, ¿se reactivará ahora que piden incluir la negociación de un referéndum?Ese clima de diálogo necesita cuatro años más de consolidación, necesitamos ampliar ese camino abierto de la mano de Pedro Sánchez y también, no quiero olvidarme, de Salvador Illa.