El calor no da tregua y la sequía continúa agravándose en toda España: los embalses registran la peor caída semanal en 11 meses

Las altas temperaturas continúan vaciando la reserva hídrica en España y agravando los problema de sequía. Según las cifras que publica cada martes el Ministerio para la Transición Ecológica, en los últimos siete días los embalses han descendido 609 hectómetros cúbicos, lo que supone un 1,09% menos de agua respecto a la semana anterior.

Es, por tanto, la quinta semana consecutiva de descenso y la peor caída semanal que han registrado las reservas hídricas en casi un año. Para encontrarse con una caída aún mayor hay que remontarse once meses atrás, cuando en la tercera semana de agosto de 2022 los embalses descendieron un total de 705 hectómetros cúbicos. 

Así, de acuerdo con lo publicado por el Ministerio que preside Teresa Ribera, los embalses se sitúan esta semana al 44,66% de su capacidad y cuentan con 25.043 hectómetros cúbicos de agua almacenados. Unas cifras que, si bien no son positivas, son mejores que las que presentaba la reserva hídrica en esta misma semana hace un año, cuando el agua acumulada registraba 24.260 hectómetros cúbicos, lo que suponía un 43,27% de su capacidad total. 

Sin embargo, la comparación con las cifras de años anteriores deja claro que la sequía se constituye como un grave problema en España. De media, esta misma semana en los últimos diez años registra 34.509 hectómetros cúbicos de agua, lo que se traduce en un 61,55%, cifras muy alejadas de las actuales. 

Las situación por cuencas es, otra vez más, muy diferente en función de la región en la que se encuentren. Las que presentan menor gravedad se sitúan en el norte peninsular: Cantábrico Occidental se sitúa al 89,4%; Cantábrico Oriental al 87,7%; las cuencas internas del País Vasco al 76,2% y Galicia Costa al 69,3%. 

En el lado contrario, las cuencas del sur son las que registran datos más alarmantes, siendo especialmente grave la cuenca de Guadalete-Barbate  que se sitúa al 20,8% de su capacidad. Le sigue la del Guadalquivir, con un 22,4%, la del Guadiana, 28,2%, y las cuencas internas de Cataluña, que se sitúan en el 30%. 

Andalucía, la más afectada 

Con estos datos, Andalucía, convertida en la región más afectada por la sequía, ha visto cómo en las últimas semanas numerosos consistorios han tenido que tomar medidas encaminadas a reducir este problema como restricciones en el consumo de agua durante el horario nocturno, el cierre del servicio de duchas en algunas playas o la prohibición de riegos en determinadas zonas. 

Por ello, el Gobierno andaluz ha anunciado este martes la resolución definitiva de una ayuda de 12,6 millones de euros derivados de los fondos Next Generation del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, unos fondos destinados a mejorar el abastecimiento y reducir las pérdidas en pequeños y medianos municipios. 

En concreto, este dinero servirá para subvencionar 61 municipios andaluces en los que viven cerca de 182.500 personas y donde será posible paliar el 38% de media de pérdida de agua que se ha producido en las redes de abastecimiento de estos territorios.