La Fiscalía pide al Supremo que reactive la orden de detención contra Puigdemont

La Fiscalía ha enviado este lunes un escrito al Tribunal Supremo en el que solicita al instructor de la causa del procés, Pablo Llarena, que reactive las órdenes de detención de Carles Puigdemont y su exconsejero Toni Comín, ambos fugados en Bélgica. La posibilidad de emitir euroórdenes contra los líderes independentistas exiliados se reabrió el pasado 5 de julio, cuando el Tribunal General de la Unión Europea (TGUE) publicó una sentencia negando su inmunidad parlamentaria de acuerdo con la decisión que tomó el propio Parlamento Europeo el 9 de marzo de 2021.  

La Fiscalía señala, en este sentido, que aunque la sentencia del tribunal Luxemburgo puede ser recurrida en casación ante el Tribunal de Justicia de la UE, dicho recurso "no tiene efecto suspensivo", con lo que "resulta procedente emitir nuevamente órdenes de detención internacionales y europeas respecto a ambos procesados". Además de las euroórdenes, la Fiscalía ha pedido a Llarena que emita una orden de busca y captura internacional contra ambos.

En su escrito, el Ministerio Fiscal recuerda que, tras la reforma de la malversación, los delitos por los que se investiga a Puigdemont y Comín llevan aparejadas "penas privativas de libertad que, dada la cuantía de los fondos malversados, podrán ser de entre 6 y 12 años de prisión". Además de este delito, a Puigdemont y su exconsejero se les investiga por desobediencia, un tipo penal que no conlleva penas de prisión y que Llarena consideró aplicar en sustitución de la derogada sedición. 

El escrito de la Fiscalía llega en un momento de máxima tensión para España, dado que la única posibilidad de Pedro Sánchez para reeditar un gobierno de coalición es contar con el apoyo o la abstención de Junts, el partido de Carles Puigdemont. Así, el propio expresident ha reaccionado a la noticia publicando un tuit con el siguiente mensaje: "Un día eres decisivo para formar un Gobierno en España y al día siguiente España ordena tu arresto". "Coaccionar para desbloquear una eventual negociación. ¿Quién se han pensado que somos?", ha escrito por su parte el exconsejero Josep Rull. 

La número uno de Junts en el Congreso de los Diputados, Miriam Nogueras, ha advertido esta misma mañana a Pedro Sánchez de que su formación no le investirá "a cambio de nada". "El Señor Sánchez decía que Puigdemont era una anécdota y me temo que, estos días, esta anécdota no le dejará dormir", ha dicho Nogueras, consciente de que la mayoría progresista que hizo presidente a Sánchez en la pasada legislatura suma ahora 172 escaños y está a cuatro de la mayoría absoluta, por lo que JxCat es clave. 

Paralelamente, durante esta agitada mañana ha sido detenida la exconsejera y eurodiputada de Junts, Clara Ponsatí, que después de que Llarena emitiera una orden nacional de detención contra ella el pasado 21 de junio, ha salido a pasear por Barcelona. 

"He vuelto a ser detenida ilegalmente en Barcelona", ha tuiteado Ponsatí minutos antes de las 12.00 horas. La eurodiputada ha sido trasladada a la Ciudad de la Justicia de Barcelona después de ser detenida en la calle Borrell, según han informado fuentes de la Consejería de Interior. 

Casi seis años después de que los líderes del procés declarasen unilateralmente la independencia de Cataluña, el papel de Junts y ERC será clave para la eventual formación de un Gobierno progresista. Puigdemont, Comín y otros seis líderes independentistas se fugaron a Bélgica en octubre de 2017 después de que el Gobierno -entonces en manos del PP de Mariano Rajoy- interviniese la Generalitat al aplicar el artículo 155 de la Constitución y dejara al Govern sin poderes. Desde entonces, Puigdemont permanece fugado de la Justicia y en este momento clave para su futuro judicial recae sobre el la gobernabilidad de España.