De Melanie Griffith a Megan Fox o Angelina Jolie: 'celebrities' que se arrepintieron y borraron sus tatuajes

Ha sido la última de una larga lista que no para de crecer. Multitud de celebrities se han arrepentido de algún tatuaje, ya fuera porque se lo hicieron en su juventud, ya fuera porque no les representa en la actualidad o simlemente porque el amor se acaba. Esa ha sido la razón de Melanie Griffith, quien desde hace tiempo ya no lucía aquel famoso "Antonio" que se tatuó sobre un corazón en su brazo derecho, cerca ya del hombro, en referencia obviamente a su matrimonio con el actor malagueño Antonio Banderas.

Ahora, la intérprete, que en apenas un par de semanas soplará 66 velas, luce otro en el mismo lugar. Uno que reemplaza al anterior y que se trata de un juego de palabras cruzadas y que vuelve a ser de amor, aunque en este caso maternofilial: Stella, Dakota, Alexander y Jesse, los nombres de sus hijos, son quienes ahora protagonizan esa parte de la piel de Griffith. 

Una opción, la de cambiar un tattoo por otro o, simplemente, eliminarlo para siempre, que no es nueva entre los famosos y famosas y que ahora vamos a repasar, pues son bastantes los actores, cantantes, humoristas, modelos y socialités que han decidido pasar por el láser para dejar atrás cierta parte de su pasado, aunque eso pueda significar rehacerlo, poner otro por encima o dejar la piel impoluta.

Eva Longoria

Hasta seis tatuajes se ha borrado Eva Longoria, quizá la celebrity que más se ha avergonzado de ellos. Durante una época de su vida, a la altura de la rabadilla, se le podía ver a Eva una porción de un tatuaje cuando usaba vestidos con la espalda al aire de los que tanto le gustan. Era solo la parte superior de una cruz que se hizo hace cerca de 20 años, incitada en buena medida por su amigo, el boxeador Óscar de la Hoya.

Pero tanto ese, como el número 'NINE' ("Nueve") de su nuca, en referencia al dorsal de su entonces esposo, Tony Parker, o la estrella de la zona interior de su muñeca, han desaparecido, habiendo ella misma documentado el proceso, el cual tildó de "doloroso".

Khloé Kardashian

Posiblemente, la moraleja de la historia de Khloé Kardashian con los tatuajes es que siempre hay que hacerle caso a una hermana mayor. Cuando era muy joven, Khloé decidió hacerse en la parte inferior de la espalda una cruz con alas y la palabra 'Daddy' ['Papi' o 'Papaíto' en español] en referencia a su padre, Robert Kardashian.

Pero como era de esperar aquel despropósito, como se llegó a tildar a ese uso de la tinta, acabó fuera de su piel. Y lo dijo en Instagram: "Es el final de una era... Me tatué a este 'chico malo' cuando tenía 16 años... Pero ya s bonito. Debí haber escuchado a Kim cuando me dijo 'No le pones una calcomanía en el parachoques a un Bentley'. ¡Adiós, mi calcomanía en el parachoques!".

Pharrell Williams

Pharrell Williams, una vez que pasó de ser únicamente un reputado productor a una cara más visible de la industria de la música a nivel mundial, tomó una decisión drástica: un injerto de piel. Lo hizo en 2008 y con el procedimiento quirúrgico consiguió trasplantar piel sana de una zona de su cuerpo a sus brazos, algo que junto con algo de tratamiento láser le eliminó la mayoría de los tatuajes que tenía en sus extremidades.

Megan Fox

Otra actriz a quien recientemente se le ha conocido otro caso de eliminación de uno de sus tatuajes. Aparte de que Megan Fox ya lo había hecho hace unos años, cuando tenía 25, momento en el que decidió que tenía que desaparecer el rostro de Marilyn Monroe que tenía en el antebrazo derecho.

En aquella ocasión se decantó por el láser, pero la experiencia, como ella misma narró, fue más dolorsa que el tatuaje en sí mismo, así que esta segunda vez ha preferido la otra opción y ha cubierto el nombre de 'Brian' [Austin Green, su exmarido] que tenía en un lateral del abdomen con un nuevo diseño: una serpiente rodeada de flores.

Jennifer Lawrence

Una de esas decisiones que una búsqueda rápida en Google habrían solucionado. Jennifer Lawrence se encontraba con la familia de Liam Hemsworth, su compañero de reparto en la saga de Los juegos del hambre, cuando se estaban tatuando todos. Y ella, por presión, pensó rápidamente uno para ponerse.

Decidió que, como le gusta estar hidratada,la solución era escribirse para siempre en la zona que conecta su pulgar y su índice derechos la fórmula H2O. Sin embargo, puso el número arriba en vez de abajo, como se escribe. Así que cuando lo descubrió, y aprovechando que era pequeño, no dudó en quitárselo.

Kaley Cuoco

La fecha de una boda que no acabó bien. Kaley Cuoco se tatuó en números romanos el día en que se casó con el tenista Ryan Sweeting, el 31 de diciembre de 2013. Sin embargo, se divorciarían en 2015. Tras debatirse entre eliminarlo o cubrirlo, optó por esto último, luciendo ahora en la parte superior de su espalda un enorme insecto, metáfora de su transformación como persona.

Colin Farrell

Lo avisó y lo ha cumplido. Colin Farrell llevaba varios tatuajes en los brazos y uno en el pecho, pero en el año 2019 dijo que se los borraría porque estaba cansado de tener que levantarse muy pronto para las sesiones de maquillaje en sus películas y prefirió quitárselo para conseguir "45 minutos extra de sueño".

Angelina Jolie

Uno de los primeros y más sonados casos. Aunque su matrimonio fue bastante efímero, Angelina Jolie tuvo tiempo de tatuarse en el brazo izquierdo, cerca del hombre, el nombre de su esposo, Billy Bob [Thornton] encima de un dragón de estilo oriental.

Eso sí, tras divorciarse en 1999 y más tarde casarse con Brad Pitt, comenzó a tatuarse en el mismo lugar, una vez borrado el anterior, las coordenadas de los lugares donde nacieron todos sus hijos. Y luego tapó las coordenadas del actor de Babylon o Érase una vez en... Hollywood.

Sarah Hyland

La estrella de Modern Family tenía un tatuaje en una de las zonas menos dolorosas para hacérselo y, a la vez, de las más incómodas para quitárselo: el culo. En mitad del glúteo, Sarah Hyland se hizo un tatuaje de un dinosaurio en el año 2017 junto a una amiga, pero un par de años después estaba totalmente arrepentida. La actriz, eso sí, quiso compartir con sus seguidores el proceso de eliminación y se grabó durante la sesión, donde tuvo que ponerse gafas de sol por el dolor.

Pete Davidson

Es imposible recopilar cuántos tatuajes se ha quitado Pete Davidson, más allá de los que se hizo por Kim Kardashian. El humorista del Saturday Night Live tiene más de cien, pero en 2022 reveló que se los había empezado a quitar. Y la razón es sencilla: el trabajo.

"Lo cierto es que nunca pensé que tuviese la oportunidad de actuar y me gusta muchísimo. Pero tengo que llegar tres horas antes para [que el equipo de maquillaje] los cubra todos, porque, por alguna razón, los personajes de las películas no tienen tantos. Así que ahora me los estoy quemando, aunque quemarlos sea más doloroso que hacértelos", explicó en una entrevista con Seth Meyers.

Jessica Alba

Una de los casos más extraños, porque por más que ha intentado quitárselo y ha hecho varias sesiones de láser, Jessica Alba no consigue que se borre del todo. Se trata de un ramo de flores azules en la parte posterior de su cuello que se hizo cuando tenía 17 años y que a día de hoy le cabrea, precisamente porque por más veces que ha hecho sesiones para eliminarlo, su rastro sigue bien visible.

Mark Wahlberg

Por madurez. Esa es la razón que esgrimió Mark Wahlberg para quitarse los tatuajes que cubrían su cuerpo. Y además lo hizo con un proceso acelerado en aquella época, antes de que existiesen maneras más modernas, a pesar de las recomendaciones. "Tenía como ocho o nueve. Me rodeaban el cuello, el vientre, los brazos, la espalda, la pierna... Me llevó cinco años quitarme todos los tatuajes. Y era unas mil veces más doloroso", afirmó.

Rose McGowan

Rose McGowan jamás ha dado a conocer la razón por la que se borró a la chica pin-up de su omóplato derecho, pero  de un día para otro desapareción y, para 2007 ya prácticamente casi no se le podía ver.

Heidi Klum

La modelo Heidi Klum conmemoró su cuarto aniversario con su entonces esposo Seal con un diseño abstracto en la parte interna del brazo que, en teoría, simbolizaban el nombre del cantante y el nacimiento de sus hijos. Inició el proceso de divorció en 2012 a la vez que se quitaba, únicamente, la parte que representaba a Seal, dejando solo las estrellas que representaban a sus retoños, aunque ya apenas perceptibles.

Johnny Depp

Solo le hizo falta quitarse una sílaba. 'Na'. El actor Johnny Depp, a finales de la década de los 80 y principios de los 90, salía con la también intérprete Winona Ryder. Y por ello decidió tatuarse aquel famoso 'Winona forever' ['Winona por siempre']. Pero cuando rompieron, con quitarle la parte final al nombre de su expareja ya fue suficiente. 'Wino forever' en sí no significa nada, pero la referencia es clara a una de sus bebidas alcohólicas favoritas.