Meritxell Batet, presidenta del Congreso de los Diputados con el PSOE durante la pasada legislatura, no renovará sus funciones para el siguiente mandato, según han informado fuentes de la presidencia de la Cámara Baja. 

Mientras, el PSOE se mantiene en negociaciones con Sumar, ERC, Junts, EH Bildu, PNV y BNG para posibilitar una mayoría de 178 diputados y, en consecuencia, una mayoría progresista en la Mesa. Será el jueves 17 de agosto cuando se constituya la Cámara Baja de los próximos cuatro años.

"Ha sido un gran honor haber desempeñado esa responsabilidad y esta convencida de que se formara una mayoría progresista en la mesa de la Cámara presidida por una candidata o un candidato socialista que permitirá continuar con los grandes avances logrados en la pasada legislatura", ha expresado en un comunicado.

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La renuncia de Batet se conoce apenas un día después de que el exdirigente de Podemos, Pablo Echenique, expresase que Batet no debía ser la próxima presidenta de la Cámara, un hecho que calificó como "temeridad" del PSOE. El exportavoz de Unidas Podemos en el Congreso hizo un llamamiento a que se elijiese a una persona de otro partido que "reúna el consenso de las diferentes fuerzas que conforman la mayoría".

Entre los motivos que justifican la negativa, Echenique recordó la ejecutoria de la socialista a la hora de moderar los debates. "Batet renunció completamente a poner límites a esa ponzoña que envenena la sociedad, permitiendo a los diputados y diputadas de VOX verter todo tipo de infamias desde la tribuna del Congreso", ha destacado.

A su jucio Batet ha sido la "principal responsable" de la "impunidad de los fascistas en esta legislatura" y ha formado parte de una operación de blanqueo "regalandoles el uso y disfrute" de la tribuna mientras que "reprendía" a la actual ministra de Igualdad, Irene Montero "por hablar de la 'cultura de la violación'", ha afeado.

También ha tenido algunos momentos de tensión con el PNV y con los  diputados independentistas catalanes, como el diputado de la CUP Albert Botran, por no permitirle hablar en catalán en la Cámara, una circunstancia que Yolanda Díaz, líder de Sumar, defiende que puede realizarse en la próxima legislatura. También fue polémica la retirada del escaño Alberto Rodríguez, entonces diputado de Unidas Podemos (y ahora en Drago Canarias, integrado en Sumar para el 23J) tras su condena de 45 días por agresión a un agente durante una protesta en 2014. 

La ministra de Hacienda en funciones y vicesecretaria general del PSOE, María Jesús Montero, ha agradecido por su parte a Batet el trabajo que ha desarrollado como presidenta del Congreso durante una legislatura "difícil y complicada". La ministra no ha dudado de que "seguirá trabajando" para impulsar políticas que tengan "reflejo a nivel nacional" y también, "y muy especialmente" en Cataluña, después de los resultados en esa comunidad, donde la socialista encabezaba la lista por Barcelona.

Meritxell Batet, jurista y profesora de Derecho Constitucional en la Universidad Pompeu Fabra, fue ministra de Política Territorial y Función Pública entre 2018 y 2019, año en que ocupó la presidencia del Congreso.