No es la primera DANA que pasa por España y el nombre ya es algo hasta familiar, pero ¿está siendo la presente especialmente virulenta?Ha sido extremadamente potente para la época del año, con temperaturas de hasta 18 grados bajo cero a 5.500 metros, valores más propios de mediados de otoño. Además, ha llegado cuando el mar Mediterráneo está mas caliente después de todo el verano. Lo que ha sucedido es que esta DANA se ha posicionado en el centro y desde ahí ha ido a toda la Península, con tormentas muy intensas que han provocado grandes acumulados de agua en muy poco tiempo, como en Cataluña y sobre todo Madrid y Toledo y también en Cádiz. Pero el acumulado de lluvia no es el más importante. En 2019, en el este peninsular dejó mas de 500 litros en muy pocas horas. Ahora, en el suroeste ayer se han superado los 200 litros. Son valores no muy altos comparados con los que se han registrado a veces en el Mediterráneo pero es una situación extraordinaria para el centro peninsular. Ha sido un récord absoluto de lluvias acumuladas en un día en Toledo.

Estábamos acostumbrados a que la gota fría en el Mediterráneo en septiembre. ¿Estas DANAS, tan virulentas y en esta época, van a ser más recurrentes, han venido para quedarse?Es complicado afirmarlo. Ha sido una DANA bastante potente para la época del año. Es complicado atribuir al cambio climático un fenómeno así de complicado pero sí estamos viendo en los últimos años que se están volviendo mas frecuentes y se ve un aumento en la frecuencia de estos episodios de lluvia intensa. Si se cumplen las predicciones a medio plazo, cabría pensar que estos fenómenos serán más frecuentes y violentos en el futuro España.

¿Qué relación tienen con el cambio climático, con el calentamiento del agua y de la atmósfera?Sin el cambio climático, esta DANA seguramente habría sido menos virulenta porque el aumento de temperaturas ha añadido gasolina extra a la situación. Con mayor vapor de agua, las tormentas tienen mas energía y el aumento de temperatura del agua del Mediterráneo, que está subiendo de forma muy rápida por el cambio climático, ha tenido también mucho que ver. Como los cambios en la circulación atmosférica. Hasta ahora, las mayores precipitaciones estaban relacionadas con la corriente atlántica pero lo que se está viendo en los últimos años es que tenemos menos corriente atlántica pero lluvias más intensas y más irregulares y frecuentes.

Este domingo, medio país estuvo colapsado, sin trenes, carreteras o incluso con vuelos anulados. ¿Qué desafío supone este cambio en las infraestructuras de un país como España?Fenómenos como el de ayer en Madrid son normales todos los años en el Mediterráneo. Ante este tipo de fenómenos, es muy difícil preparar las infraestructuras. Lo que hay que potenciar es la prevención y por ejemplo el sistema de notificación que tanto ha dado que hablar es un buen ejemplo. Se puede mejorar y cambiar, pero nos ha permitido seguramente salvar varias vidas y lo tenemos a la altura de países como Japón o EEUU, donde es algo ya normalizado. Creo que el camino tiene que seguir esa dirección.

¿Le pareció excesiva la alarma por la alerta, por el mensaje de móvil que se envió en Madrid?Sí que me lo pareció y me llamó mucho la atención. De hecho, yo quiero resaltar que sin ese aviso de la AEMET y sin esa alerta enviada por Protección Civil seguramente habría muerto más gente. Precisamente, en los últimos años la progresión es que hay menos [muertes] que antes, ahora la mayoría son imprudencias. La prevención es muy importante y también adaptar las ciudades a la situación de cambio climático. En muchas de estas riadas que hemos visto el problema venía de que son ramblas que se destruyeron porque se secaron. O crear parques inundables y también se está incrementando mucho la construcción de tanques de tormentas. Podemos hacer prevención y adaptar los espacios urbanos para mitigar los efectos del cambio climático.

Hablando de prevención, ¿los modelos que manejan reflejaron bien lo que luego ha sucedido? ¿La AEMET 'afinó' bien en sus predicciones?Los modelos con los que trabajamos en MeteoRed nos avisaban que desde siete días antes de esta situación potencialmente adversa y peligrosa y lo comentamos varias veces en las redes sociales y en nuestra página [web]. Esto hace 10 o 15 años era impensable. Nuestro modelo de cabecera preveía para Madrid y Toledo un acumulado de más de 200 litros metro cuadrado, y se ha terminado cumpliendo a la perfección. El problema es que en esta ocasión son tormentas muy intensas pero también de modo torrencial y cualquier mínimo cambio en la trayectoria de la DANA puede hacer que se mueva a 20 ó 30 kilómetros, que es algo con lo que tenemos que lidiar todos los años en el Mediterráneo. Es algo muy complejo y es imposible predecir con total exactitud. Los modelos han estado muy acertados y yo quiero felicitar a la AEMET y a Protección Civil, porque sin ellos seguramente estaríamos hablando de un catástrofe bastante mayor.

¿Qué evolución se espera para los próximos días y cuando se podrá hablar de normalización?En las próximas horas todavía podemos tener tormentas intensa en el sistema ibérico, Castilla-La Mancha, Cantábrico oriental y mañana se quedara estática en las costas del oeste. Se esperan algunas lluvias más intensas en Galicia y en los próximos días habrá algún chubasco disperso en Valencia o Alicante. En las ultimas horas, gana protagonismo la calima en buena parte del país y el fin de semana es posible que los restos de la DANA pueda bajar temperaturas, pero no hablaríamos de una situación tan extrema como la de estos días.

¿Cómo ha visto el comportamiento de la población?Lo que percibí ayer sobre todo en gente de Madrid es que hace falta mucha cultura meteorológica. En el Mediterráneo, por ejemplo, estamos acostumbrados a lidiar con estos fenómenos extremos y la gente ya acepta desde hace mucho que estas situaciones son muy complicadas de prever y lo mejor que se pueda hacer es prevenir, porque después llega el desastre y pasa lo que pasa. Como ha sido muy anómala, esta situación ha pillado a mucha gente de sorpresa y los comunicadores meteorológicos tenemos que intentar comunicar la dificultad de la predicción y que podemos tener diferencias enormes en muy pocos kilómetros, que aunque no le llegue a tu casa, a 20 kilómetros puede haber un desastre como ha pasado en Madrid. En la capital, la gente se quejaba de que no habían caído 200 litros, que es lo pasaba a unos kilómetros.

¿Ya está bien por este año o tendremos más episodios de este tipo este año, en los próximos meses?Sí, seguramente tengamos algunos en los próximos meses, estamos en la época de mayor riesgo. Parece que vamos a tener después de esta DANA una temporada más o menos tranquila pero las previsiones señalan que en otoño en el este de la Península, no se descarta pensar que en lo que quede de otoño, que es mucho, tengamos algún descuelgue en varios puntos de España. Como siempre, la zona mediterránea tiene todas las papeletas.