El PSOE admite contactos con Junts y ERC y abre la puerta a una consulta interna si hay acuerdo para la investidura de Sánchez

MADRID, 11/09/2023.-María Jesús Montero, ministra de Hacienda y Función Pública, este lunes durante la rueda de prensa en la madrileña sede de Ferraz.-
María Jesús Montero, ministra de Hacienda y Función Pública, este lunes durante la rueda de prensa en la madrileña sede de Ferraz.-
EFE/ Javier Lizon
MADRID, 11/09/2023.-María Jesús Montero, ministra de Hacienda y Función Pública, este lunes durante la rueda de prensa en la madrileña sede de Ferraz.-

Moncloa lo avanzó hace semanas y ahora el PSOE lo confirma. Los socialistas no están "perdiendo el tiempo" pese a que tratan de que el foco informativo esté sobre Alberto Núñez Feijóo, quien protagonizará una sesión de investidura dentro de dos semanas, y su "imposibilidad" de lograrlo. Esto se traduce en la confirmación de contactos con los grupos en los que confían para volver a hacer presidente de nuevo a Pedro Sánchez -incluidos los independentistas-, aunque no aclaran sobre qué están tratando esas conversaciones. A su vez, guardan silencio sobre su posición respecto a la amnistía, pero, ante las críticas de primeras espadas del PSOE más histórico, abren la puerta a una consulta a la militancia sobre lo que se termine pactando.

"¿El PSOE va a perder todo este tiempo? No", ha lanzado la vicesecretaria general del partido, María Jesús Montero. En una rueda de prensa tras la celebración de la Ejecutiva Federal de este lunes, ha señalado que los socialistas "van a seguir con sus conversaciones discretas" y ha aclarado que será "cuando haya resultados, si los hay" y pase la investidura de Feijóo cuando den cuenta de "si se ha producido o no un acercamiento, en qué términos, qué planteamos y cuál es la hoja de ruta".

La también ministra de Hacienda en funciones ha querido defender estos contactos "con formaciones políticas que tienen que dar el sí a la investidura" frente a las críticas del PP, que ha asegurado este lunes que Sánchez "bajará la cabeza por llegar a la Moncloa". A Feijóo le ha pedido que aclare el "encaje territorial" que quiere para Cataluña mientras ha censurado que desde filas ‘populares’ digan que si el PSOE habla con Junts o ERC sea "la quiebra de España".

Con todo, Montero ha insistido en que la situación de la Cataluña del 2022 es "mucho mejor" que la de 2017, que la celebración de la Diada así lo demuestra y que el límite de los socialistas es la Constitución Española -lo ha trasladado el propio Sánchez en Twitter en un mensaje en castellano y catalán en el que ha asegurado que Cataluña ha abierto un nuevo camino de convivencia y es momento de "mirar al futuro"-. Sobre las aspiraciones de amnistía y referéndum, la número dos de Sánchez ha asegurado que "no aportan nada nuevo". La ministra no se ha mostrado "sorprendida" por estas peticiones y ha recordado que los socialistas están "en las antípodas". Eso sí, ha defendido que "siempre hay espacio para el encuentro".

En este punto, ha abierto la puerta a una posible consulta a la militancia en caso de que se produzca un acuerdo. Ante las críticas de Felipe González, expresidente del Gobierno, y otros socialistas históricos a la posibilidad de una ley de amnistía, Montero ha asegurado que en el PSOE "quien se mueve sí sale en la foto" y ha defendido que el partido es "diverso, plural y tiene mecanismos democráticos para asegurar que la posición de la dirección es respaldada por la mayoría del partido". "Cuando toque, cuando sea el momento de contar si tenemos un acuerdo o no, será el momento de que el conjunto del PSOE se pronuncie", ha remachado.

Otro de los puntos principales del argumento desplegado por la vicesecretaria general ha sido querer sobreponerse a los 11 millones de votos que Feijóo dicen que respaldan su investidura, sumando los del PP, Vox, Coalición Canaria y Unión del Pueblo Navarro. Montero ha defendido que hay otros 12 millones de electores que se “opusieron” a un gobierno formado "por la derecha y la ultraderecha". El 23 de julio España "se pronunció", ha dicho, "y lo hizo contra un gobierno del PP con Vox", a los que ha pedido "asumir los resultados" porque "no entra en el juego democrático" pedir elecciones "hasta que salga lo que uno quiera".

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