EN COLABORACIÓN CON TELEFÓNICA
Ramón Arroyo se define como una persona normal a la que le sucedió algo extraordinario.
Ramón Arroyo se define como una persona normal a la que le sucedió algo extraordinario.
TELEFÓNICA

La vida de película de Ramón Arroyo, el triatleta que afronta la esclerosis múltiple con deportividad

  • Le diagnosticaron esta enfermedad con apenas 30 años y casi una década después se atrevió a participar en un Ironman. Su historia ya pertenece al cine con la película 100 metros y, ahora, también forma parte de los relatos inspiradores de Mejor Conectados, una iniciativa de Telefónica.

Esta es la historia de una familia ordinaria a la que le sucedió algo extraordinario, pero en el mal sentido de la palabra, que también es posible. Todo comienza con el diagnóstico de esclerosis múltiple a Ramón Arroyo, el nuevo protagonista de la iniciatia de Telefónica Mejor Conectados, que cuando apenas tenía 30 años le detectaron esta enfermedad que cambió su forma de vivir y de ver la vida. Los médicos le auguraban un futuro gris y le dijeron que en un año no podría andar 100 metros. Desde ese momento empezó a correr y, tras completar distintas carreras populares y maratones, se propuso realizar un Ironman, la prueba más exigente del triatlón.

La esclerosis múltiple es una enfermedad autoinmune que ataca cualquier parte del sistema nervioso y que normalmente cursa por brotes. Estos brotes son indeterminados y no avisan: no se puede saber cuándo van a actuar ni qué consecuencias van a tener para cada persona. De hecho, el protagonista de esta iniciativa de Telefónica se centra en los efectos anímicos que pueden causar estos episodios y no en los físicos. Concretamente, habla de la incertidumbre y afirma que la peor secuela es ignorar en qué momento y de qué forma va a suceder. “Es impredecible”, asevera.

Se trata de un reto nuevo y desafiante que él mismo cuenta en su libro Rendirse no es una opción y que también ha quedado plasmado en la gran pantalla con la película 100 metros, protagonizada por Dani Rovira. En ambos casos se refleja cómo pasó de tenerlo todo a vivir con una constante sensación de incertidumbre. Algo que Ramón Arroyo ha aprendido a gestionar con comunicación y haciendo partícipes a las personas importantes de su vida de lo que le ocurre. “El 90% de las ocasiones la gente que te puede ayudar es la gente que te quiere y la gente que sabe; y es muy fácil conectar con ellas”, asegura.

“La gente puede tener empatía pero si desconoce lo que te pasa, no puede hacerlo”, defiende. Por eso, recomienda realizar un ejercicio de humildad para expresar lo que nos pasa y que ellos lo entiendan. “Lo que no se ve, no existe”, insiste. Nuestro protagonista buscó ayuda en su núcleo más cercano y en la idea de que, aunque les había ocurrido algo extraordinario, ellos eran normales. “Nos hemos apoyado en varios pilares, pero yo creo que uno fundamental es haber tenido la capacidad de ser conscientes que realmente somos una familia normal”, destaca.

En este sentido, defiende que el “verdadero talento” de la gente común es reconocer que no brillamos especialmente en nada y, en consecuencia, tener claras nuestras debilidades. “Hacer un ejercicio de autocrítica y saber qué cosas nos roban energía es muy importante”, detalla. “Si nosotros, a pesar de nuestras limitaciones y de nuestros no talentos, hemos sido capaces de tener éxito; ha sido porque nuestra historia es de verdad”, garantiza. “Cuando tú eres real y sincero, desarrollas un superpoder de conectar con los demás”, añade. 

“Nosotros somos una familia ordinaria pero nos ocurrió algo extraordinario”

Con 52 años, Ramón Arroyo es economista y aprovecha sus redes para difundir un mensaje esperanzador, demostrando que la determinación y la capacidad de adaptación pueden tener un impacto positivo en uno mismo. “Cuando tú haces caso a la gente que te quiere y a la gente que sabe, puedes sacar las cosas adelante”, enfatiza.

Su valentía y su apuesta por el deporte fueron sus grandes fortalezas para romper barreras y avanzar hacia nuevos horizontes. Precisamente, su pasión por el atletismo surgió de su espíritu de superación. Empezó con distancias de 100 metros y, poco a poco, llegó a sumar decenas de kilómetros en competiciones. En el 2013, cuando habían pasado nueve años desde que le diagnosticaron esclerosis múltiple, se atrevió con un Ironman; una prueba de alto nivel que consiste en 3,8 kilómetros de natación, 180 kilómetros de bicicleta y 42 kilómetros de atletismo. 

Ramón Arroyo completó un Ironman después de un diagnóstico de esclerosis múltiple.
Ramón Arroyo completó un Ironman después de un diagnóstico de esclerosis múltiple.
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Sin embargo, Ramón Arroyo explica que su determinación no es el único ingrediente para alcanzar la luz al final del túnel. En este punto, especifica que otro de los ‘superpoderes’ es la capacidad de saber filtrar. Las relaciones personales pasan por distintas etapas y es natural algunas se pierdan. “A veces hay que romper vínculos”, dice Ramón Arroyo, quien determina que “hay mucha gente que quiere subirse al carro y tienes que desarrollar la capacidad de detectar qué personas aportan o restan”.

En este sentido, advierte de que “decir que no es una respuesta perfectamente educada a cualquier tipo de pregunta”. Por eso señala que es importante ser asertivo y romper nuestra relación o vínculo llegado el momento. “No es tarea fácil, pero yo creo que es un trabajo que debemos hacer”, indica. No obstante, subraya que es más importante incorporar a gente en el equipo que sume y cuidar muchísimo a la gente que te aporta y te quiere. “La primera parte resta, pero resta menos uno; la segunda, multiplica por dos”, concluye.

Conectando lo normal con lo extraordinario

Ramón Arroyo es la cara del último contenido de Mejor Conectados, una iniciativa de Telefónica para que las personas se sientan capaces de lograr lo que se propongan. A través de historias que retratan a la perfección la idea de que “cuando conectamos, somos capaces de hacer cosas increíbles”; la multinacional pone en valor el poder de las relaciones humanas. “Queremos hacer nuestro mundo más humano conectando la vida de las personas”, manifiesta José María Álvarez-Pallete, presidente de la compañía.

El apartado ‘Inspírate’ recoge historias protagonizadas por diferentes personajes como el tenista Rafa Nadal, el chef Ferrán Adrià, la nadadora paralímpica Teresa Perales, el triatleta Javier Gómez Noya o el exjugador de baloncesto Nacho Azofra, que hicieron posibles grandes logros. Mientras que ‘Aprende’ cuenta con una serie de pequeñas “clases magistrales” de la mano de figuras como Molo Cebrián, Marta Gilart, Gemita, Iñaki Gabilondo, Toni Nadal, María Zabala o Amaya Valdemoro. “Mejor Conectados quiere ser un lugar donde inspirarse, encontrarse, conectar y lograr cosas increíbles”, agrega Rafael Fernández de Alarcón, director de Marketing Global de Telefónica.

  • REALIZADO POR ALAYANS STUDIO
    Este contenido ha sido elaborado por ALAYANS STUDIO, unidad Branded Content de Henneo.