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Elon Musk comparte una foto privada de su expareja Amber Heard sin su permiso

El magnate Elon Musk.
Dan Matt vía Flickr

Son casi los 50 estados los que ya lo tienen legislado pero, por poner un ejemplo, en Nueva York es delito desde 2018 lo que se conoce como revenge porn, o "porno de la venganza". Es decir, la distribución sin consentimiento de fotos y vídeos íntimos de una expareja. Las penas implican multas de hasta 1.000 dólares y hasta un año de cárcel. Y, aunque parece poco probable, si Amber Heard se decide, podría denunciar a Elon Musk, que ha hecho exactamente eso.

El magnate dueño de X (Twitter), Tesla y SpaceX se encuentra ya promocionando la biografía que ha escrito sobre él el periodista y biógrafo Walter Isaacson, quien ha estado siguiéndole y realizándole entrevistas los últimos tres años. Y para ilustrar su relación con la actriz de Aquaman ha subido una imagen íntima de Heard en un cosplay.

Desde Page Six han podido saber que la intérprete no le dio en ningún momento permiso para difundir su fotografía caracterizada como un personaje, Mercy, reconocible por su traje neo-punk blanco y unas alas doradas y mecánicas, del videojuego Overwatch, afirmando la publicación que Amber quería que esa fotografía continuase en el ámbito "privado".

Elon Musk publicó la imagen en un tuit este pasado martes porque quería confirmar una anécdota que aparece en dicha nueva biografía suya, si bien el citado portal afirma que Heard se ha sentido verdaderamente ofendida por lo que ha hecho su expareja, de quien siente que le ha traicionado su confianza.

Entre otras cosas, porque "Elon le pidió varias veces que hablara con Walter" para el libro que estaba escribiendo sobre él, algo a lo que ella finalmente accedió "por respeto a Elon". En el libro, Isaacson cuenta que fue idea de Heard disfrazarse así después de que el millonario, de 52 años, le dijese que se parecía mucho a dicha heroína rubia.

"Ella se pasó dos meses diseñando y encargando un disfraz de pies a cabeza para poder interpretarle ese papel a él", escribió el periodista en el libro. Ante las preguntas de los usuarios que habían leído esa parte, Musk decidió publicar la fotografía, explicándola: "Sí, ella se vistió como Mercy. Y fue increíble". 

La fotografía, tomada con un teléfono móvil, se diferencia del personaje del videojuego en que Amber dejó el escote abierto, por lo que el público ha entendido que había connotaciones sexuales y de ahí el posible delito, ya que por aquel entonces eran pareja —salieron intermitentemente durante un año en 2017—.

Ni los representantes de Musk ni los de Amber han querido pronunciarse por ahora a este respecto.

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