La princesa Leonor recibió este martes de manos de un estudiante de segundo de la Academia General Militar de Zaragoza, donde se instruye desde agosto, el sable que simboliza que, al concluir su formación, se convertirá en oficial del Ejército.
Tanto la princesa Leonor como sus 600 compañeros de primer curso recibieron el sable que escenifica "la relación de compañerismo y tutela que debe de existir entre el veterano y el nuevo", según la Academia Militar.
Estos sables han sido fabricados en Toledo tras superar unos estrictos controles de calidad por parte del Ejército y cuestan 133,1 euros cada uno, según detalla La Razón.
La empresa Espadas y Sables de Toledo S.L se encarga de su fabricación tras recibir un pedido de 380 sables por un valor total de 50.578 euros. Entre los controles de calidad exigidos, el contrato detalla que se ponga a disposición de la Academia Militar "un certificado de un laboratorio oficial" que especifique "la determinación cualitativa de los materiales empleados", detalla este medio.
La empuñadura del sable está fabricada en latón "con un contenido mínimo del 60% en cobre, forjado, pulido brillo espejo y terminación mínima de dos capas: niquelado y baño de oro 24 quilates, con protección de laca electrolítica", detalla este medio.
La hoja es de acero inoxidable con un contenido en cromo superior al 12%. Su forma es completamente recta, con un canal de 525 mm, de 13 mm de ancho en la parte superior y 8 mm en la parte inferior. La hoja lleva grabado el sello del fabricante.
La vaina es "de acero carbono 1 mm estampado en dos mitades soldadas o tubo conformado, de sección elíptica, pulido brillo espejo, niqueladas y cromadas con un portaanillas situado a 90 mm de la boquilla, terminada en un regatón simétrico de los lóbulos tipo guitarra".
En total, cada sable pesa 1,2 kilos y su longitud es de 94,4 cm.
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