Collboni mantendrá la limitación de hoteles que fijó Colau en el centro de Barcelona

El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, ha asegurado que conservará la limitación de hoteles que señala el plan especial urbanístico de alojamientos turísticos (PEUAT), “sobre todo en el centro de Barcelona”.

El socialista, una entrevista en TV3,  ha defendido que los hoteles “son el mejor aliado del turismo de calidad”, pero ha confesado “que no pueden crecer indefinidamente”. Así pues, Collboni ha defendido que el PEUAT ha “logrado detener el crecimiento de hoteles desmedido” creciente en el centro, mayoritariamente, en Ciutat Vella. El alcalde, también ha afirmado que la medida aún permite crear 4.000 nuevas plazas hoteleras en otras zonas como la Sagrera.

Barcelona tiene un límite de carga turística

Sobre el PEUAT, Collboni ha defendido la medida porque Barcelona "tiene un límite de carga turística". Así pues, ha manifestado que "no se puede limitar el número de turistas, pero sí el número de camas". En el caso de Ciutat Vella, se trata de un distrito que es "prioridad" del consistorio. El objetivo principal es que la reforma de Via Laietana permita convertir la zona en un "eje económico".

Según Collboni, la intención del gobierno municipal es conseguir que en máximo de diez años trabajen hasta 6.000 personas. "Si tú detienes una fuente de creación de puestos de trabajo, en este caso los hoteles, debes permitir que otros sectores generen puestos de trabajo, y eso es Ciutat Vella", ha destacado

1.800 agentes de la Guardia Urbana, Mossos d'Esquadra y Protección Civil

Por otro lado, Collboni ha comentado que el consistorio desplegará a 1.800 agentes policiales durante las Fiestas de la Mercè. La Guardia Urbana, los Mossos d’Esquadra y Protección Civil, estarán presentes con tal de garantizar la seguridad y la convivencia durante las celebraciones, ya que les preocupa los delitos de violencia de género y las agresiones LGTB-fóbicas.

Apuesta por monetizar la medida del 30% de vivienda asequible

El alcalde confiesa que la iniciativa aprobada esta semana en la Comisión de Vivienda del Ayuntamiento de Barcelona sobre la flexibilización de la norma que obliga a reservar un 30% de las nuevas construcciones a vivienda protegida, “no ha funcionado” y el objetivo del consistorio no es retirarla, sino “hacerla eficaz”.

El consistorio trabaja en una nueva iniciativa para que el ayuntamiento recaude el equivalente en dinero del 30% de vivienda asequible de cada nueva construcción para emplearlos a un fondo para hacer vivienda protegida.