Catalá incrementa las inspecciones a los locales de ocio tras la tragedia de Murcia

El Ayuntamiento de Valencia va a llevar a cabo un plan de inspecciones que coordinará al área municipal de Licencias con la Policía Local para revisar las condiciones en las que prestan su actividad los locales de ocio de la ciudad, principalmente pubs y discotecas, tras la tragedia que ha costado la vida a 13 personas en Murcia como consecuencia de un incendio originado en uno de estos establecimientos. Pero la acción no solo se centrará en el ocio nocturno. El Gobierno municipal ha decidido incluir en la programación a los apartamentos turísticos, cuya proliferación ocasiona problemas de convivencia ya no solo en el centro histórico, sino en cada vez más barrios, con el objetivo de comprobar la legalidad de su funcionamiento.

Según ha anunciado la alcaldesa, María José Catalá, la acción se ha concretado con la creación de un grupo de trabajo conjunto entre el servicio de Licencias de Actividad y la Policía Local. "Tendrá una reunión quincenal para planificar todas las inspecciones en locales de la ciudad", indicó la responsable municipal. Catalá afirmó que los consistorios tienen que hacer un esfuerzo después de lo que ha pasado en Murcia "para reforzar todos los servicios municipales y para intentar que no vuelva a pasar nada de lo que ha pasado con esta tragedia", subrayó.

"La seguridad de las personas es lo primero y desde el Ayuntamiento llevamos una semana trabajando en esto y ahora hay un grupo de trabajo creado para hacer quincenalmente la programación de inspecciones que se van a hacer a locales de espectáculos, ocio y apartamentos turísticos que no son legales", insistió.

"Necesitamos que todas las inspecciones se hagan de forma puntual y nosotros vamos a estar encima y pendientes de todo aquel que no tenga todo en regla", aseguró. Para la alcaldesa, es necesario "mejorar la coordinación entre la Policía Local y el servicio de Actividades para garantizar el éxito de estos trabajos. Debe establecerse una colaboración constante que incida directamente en reducir cualquier riesgo en este tipo de locales".

Desde el Ayuntamiento de Valencia destacan la labor que en los últimos años ha realizado la Policía Local "en el cumplimiento de las distintas órdenes dictadas por los servicios de Licencias e Inspección, de forma que en la actualidad todas las órdenes de cese han sido ejecutadas en sus propios términos", apuntaron desde el Consistorio a través de un comunicado.

El pasado mes de agosto, el nuevo Gobierno municipal ya anunció la puesta en marcha de un plan específico de inspección para detectar los apartamentos turísticos en situación irregular, que el propio Consistorio calcula en unos 4.000 en la ciudad. Junto a estas inspecciones, el Ayuntamiento apuesta por la aprobación de una ordenanza específica que regule la actividad de estas viviendas.

Por su parte, los grupos de la oposición que hasta hace unos meses conformaban el Ejecutivo local abogan por una regulación sobre estas viviendas de uso turístico e incluso por una moratoria temporal en la concesión de licencias. Es el caso de Compromís, que propone regular el fenómeno turístico a través de la creación de una comisión no permanente del pleno del Ayuntamiento de Valencia en la que exista representación de todos los grupos políticos y que tenga un año de plazo para presentar una propuesta. Durante ese año, de forma paralela, propone aprobar una moratoria para nuevas licencias de este tipo de instalaciones en la ciudad.

La portavoz socialista, Sandra Gómez, afirmó en agosto que su grupo dejó "preparada la regulación para combatir la proliferación de los apartamentos turísticos en viviendas en todos los barrios de la ciudad» y exigió su aprobación "para dar una solución definitiva a la problemática de la vivienda". En este sentido, Gómez afirmó que hay vecinos de Ciutat Vella o del Cabanyal que pueden "acabar siendo expulsados de sus viviendas" porque haya fondos que puedan comprar y comercializar edificios como pisos turísticos.