La lluvia no ayuda a la sequía: los embalses vuelven a bajar y agravan la situación en las cuencas de Andalucía y el Mediterráneo

El agua embalsada continúa cayendo otra semana más pese a las lluvias de estos días, que no consiguen remontar los problemas de sequía que vive nuestro país y que son especialmente graves tanto en la costa andaluza como en la costa mediterránea. 

La reserva hídrica se sitúa así esta semana en el 34,6% de su capacidad, una cifra a tener en cuenta pues supone la primera vez que los embalses se encuentran por debajo de la barrera del 35% en este 2023. Son, exactamente, 19.368 hectómetros cúbicos de agua los que tiene acumulados la reserva española hasta este martes.

Así lo reflejan los datos que publica el Ministerio para la Transición Ecológica, quién revela que los embalses han perdido en estos 7 días un total de 407 hectómetros cúbicos, lo que supone un 0,7% menos comparado con la semana pasada. 

Y todo ello pese a que, como indica este organismo, las precipitaciones han afectado considerablemente a la vertiente Atlántica estos días y, en menor medida, también a la vertiente Mediterránea, siendo Barcelona el punto que ha registrado más litros por metro cuadrado, concretamente 51,6.

Se trata, además, de un descenso que llevan experimentando los embalses de forma consecutiva desde hace cuatro meses, en concreto, son ya 18 semanas las que la reserva no ha parado de bajar. 

Con todos estos datos, cabe destacar que la situación era todavía mucho más grave el año pasado cuando, en esta misma semana, la reserva hídrica se encontraba al 31,45% de su capacidad y contaba con 17.599 hectómetros cúbicos. 

Hay que revisar por tanto los números de años anteriores para reflejar la situación de gravedad a la que se enfrenta España. Y es que esta misma semana se sitúa, de media en los últimos diez años, en una cifra de 26.837 hectómetros cúbicos, lo que equivale al 47,89% de su capacidad, unos niveles muy alejados de los que se registran hoy en día.

La situación por cuencas

Por cuencas, las que revisten una mayor gravedad vuelven a ser otra semana más las ubicadas en el sur peninsular y las de Cataluña. La cuenca con los peores registros de España es la de Guadalete-Barbate, que se sitúa al 15,1%. A esta le siguen Guadalquivir al 17,9%; Cuencas internas de Cataluña al 20,7%; Cuenca Mediterránea Andaluza al 22,5%; Segura al 22,9% y Guadiana al 23,5%. 

En una parte media se sitúan la cuenca del Ebro al 33,3%; Duero al 41,3%; Tajo al 46%; Júcar al 47,1% y Tinto, Odiel y Piedras al 51,1%.

Por el contrario, las que mejor situación presentan son las del norte peninsular, aunque hay que mencionar que a finales de septiembre estas cuencas se encontraban por encima del 80% y ya ninguna supera esos datos: Cantábrico Oriental se encuentra al 78,1% y a ella le siguen Cantábrico Occidental al 70,4%; Cuencas internas del País Vasco al 66,7%; Miño-Sil al 56,4% y Galicia Costa al 53,4%.