"La amnistía, se le ponga el nombre que se le ponga, es un retroceso en la calidad de nuestra democracia, la credibilidad de las instituciones y la igualdad entre españoles". Así se ha pronunciado el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, durante su intervención en el debate sobre la amnistía que está teniendo lugar en el seno de la Comisión General de Comunidades Autónomas del Senado, y al que han acudido unidos los once presidentes regionales del PP.

El líder del Ejecutivo andaluz ha comenzado valorando como "muy positiva" la asistencia a la Cámara Alta del presidente de la Generalitat catalana, Pere Aragonés, donde ha defendido la amnistía como un paso previo al referéndum pactado, así como su "participación en foros multilaterales como este", ya que "ausentarse una y otra vez solo conduce al aislamiento" y "Cataluña no debe aislarse" como "parte fundamental de Estaña" que es, ha dicho.

Sin embargo, y tras afirmar haber escuchado con "mucha atención y muchísimo respeto" a Aragonés, Moreno ha lamentado que este no haya permanecido en el Senado tras su intervención para "escucharnos a los demás con la misma atención y respeto".

En línea con lo expresado hasta ahora, el presidente andaluz ha aseverado que si finalmente el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, concede la amnistía "a los fugados, procesados y condenados por desafiar la Constitución" sería "mucho más que un indulto", ya que "no es perdonar, es pedirles perdón".

Además, el andaluz ha lamentado que esta decisión política "tan trascendental" se tome "solo por el interés de una persona para seguir en el cargo de presidente del Gobierno, nos cueste lo que nos cueste". Este "trato privilegiado", ha continuado", "no es generosidad, ni liderazgo ni compromiso con España", es, ha reiterado, "interés personal".

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"Yo he venido a defender algo fundamental, la igualdad entre los españoles, incluido Cataluña", ha dicho Moreno, que ha lamentado que "nadie del Gobierno de España haya venido a defender los mismo", un Gobierno "de todos los españoles", ha manifestado, que "no puede decidirse en contra del interés y del bien común". 

Tras reiterar en varias ocasiones que representa a 8,5 millones de "españoles que viven en Andalucía", el presidente de la Junta ha cargado contra la medida de gracia que Sánchez estaría negociando con los independentistas, unas negociaciones "bilaterales" en las que considera que no hay "discreción" y sí "opacidad". "Y lo que se oculta, normalmente no suele ser nada bueno para la mayoría", ha resaltado Moreno.

Para el andaluz, los "mejores éxitos" de España siempre han venido de la mano de "la unidad y el esfuerzo colectivo", por lo que ha asegurado que "quebrar la igualdad pone en riesgo nuestro progreso como país". Andalucía, ha dicho en este sentido, es "extensa, plural y diversa", al igual que el territorio español, pero esa "pluralidad y diversidad que nos enriquece no puede significar desigualdad" ni la "consagración de ciudadanos de primera y de segunda". 

Financiación autonómica

El presidente de la Junta ha aludido también en su intervención al modelo de financiación autonómica cuyo cambio viene reclamando Andalucía desde hace muchos años como una de las comunidades más perjudicadas por el sistema actual. En este sentido, Moreno ha aseverado que los andaluces "no nos vamos a resignar a perder, porque llevamos muchos años haciéndolo". En concreto, más de 15.000 millones de euros desde el año 2009, ha afirmado.

Por ello, ha vuelto a reclamar fondo transitorio de compensación para las regiones "peor financiadas" hasta que se produzca el cambio de modelo, que, ha subrayado, debe ser negociado en el Consejo de Política Fiscal y Financiera "con luz y taquígrafos" y "no en un despacho oscuro de Waterloo".

En términos económicos, Moreno también ha reclamado que los Presupuestos Generales del Estado (PGE) reconozcan la "singularidad hídrica" de Andalucía, así como medidas para "blindar" la Sanidad, extremos que ha calificado como un "problema de país" por la "falta de médicos".

Los andaluces, ha concluido, "merecemos respeto como la tercera economía de España", y por ello "vamos a reclamar el mismo trato y respeto" que el resto de los territorios. "Estamos decididos a alzar una voz clara en defensa de la igualdad con la fuerza que nos da ser la comunidad en la que viven más españoles".