Desestiman la querella contra el policía que presuntamente se infiltró en movimientos sociales de Barcelona

El Juzgado de Instrucción 21 ha desestimado la querella interpuesta por ocho mujeres activistas contra un agente de Policía Nacional que utilizó las relaciones sexoafectivas para infiltrarse en los movimientos sociales de Barcelona durante más de tres años. "Estas relaciones no han sido casuales, sino estratégicas”, han dicho las afectadas.

En un comunicado de Irídia, una organización que se encarga para defender los Derechos Humanos y, de la Confederación General del Trabajo (CGT), se ha explicado que el caso fue destapado en enero, y que las víctimas presentaron una querella por delitos de tortura, descubrimiento y revelación de secretos, entre otros.

Tras el fallo del Juzgado, Irídia ha detallado que recurrirán la decisión en la Audiencia Provincial a la espera de que, como ha sucedido en casos similares, la Audiencia les dé la razón e investiguen el caso de forma efectiva y reforzada en el marco de la prohibición absoluta de la tortura.

Critican la decisión de Marlaska de no querer investigar

Así pues, las mujeres han recordado que este tipo de infiltraciones solo pueden realizarse “en un marco de investigaciones judiciales relativas a casos de terrorismo, crimen organizado y tráfico de estupefacientes, circunstancias que no concurren".

Asimismo, han asegurado que es "muy preocupante" que, ante las denuncias, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, no admitiera ni la existencia de esta operación de Estado ni la necesidad de investigarla.

“Es intolerable que el máximo responsable de Interior dé por hecho que en ningún caso las fuerzas de seguridad incurren en malas praxis o eventuales comportamientos delictivos e ignore denuncias tan graves de la ciudadanía", han expresado.

Irídia y CGT, como representantes legales de las afectadas, exigen que se lleve a cabo una investigación "independiente, exhaustiva y efectiva para aclarar los casos de infiltraciones de manera inmediata".