Los líderes de la UE piden "una pausa" en Gaza para abrir "corredores humanitarios"

La Unión Europea no se ha inmunizado ante las crisis, pero sí parece haberse acostumbrado a convivir con ellas, incluso en aquellas en las que la unidad no está tan clara como pasó con la invasión rusa de Ucrania. Eso es precisamente lo que sucede respecto a la guerra entre Israel y Hamás y con esa división sobre la mesa se han reunido este jueves los líderes de los 27 en una nueva cumbre del Consejo Europeo en Bruselas. 

El objetivo era encontrar un lenguaje de consenso para pedir una respuesta humanitaria, ya fuera llamándolo "pausa", "alto el fuego humanitario" o "pausas humanitarias", en plural. Ahí se encallaron los jefes de Estado y de Gobierno, con posturas más duras como las de Austria o Alemania, y otras más livianas como las de Francia o Italia. Finalmente, los Estados miembros han acordado pedir "una pausa por necesidades humanitarias" en los bombardeos con el objetivo "de abrir corredores" para la salida de los civiles, de acuerdo a las conclusiones.

En el documento final, los 27 abogan por la "protección de los civiles", así como por la búsqueda de una salida diplomática con un diálogo con la Autoridad Palestina. Además, se comprometen a trabajar en la solución de los dos Estados, que la UE defiende desde hace décadas. En el último punto avisan también de la necesidad de combatir la desinformación que existe en torno al conflicto. En el panorama actual, apuestan asimismo por celebrar "pronto" una conferencia de paz, una idea que ya ha puesto España sobre la mesa.

Fuentes de la delegación española reconocieron que se está haciendo hincapié en el esfuerzo negociador y en ese escenario la UE tiene que tener una posición clara, afrontando la crisis humanitaria que se está dando y en la que se tiene que hacer llegar la ayuda a los civiles afectados. El debate estuvo en el cómo: si con pausas humanitarias, una pausa humanitaria o con un alto el fuego, siempre teniendo en cuenta el derecho de Israel a defenderse de acuerdo al Derecho Internacional. España está a favor de un "alto el fuego humanitario", tal como ha repetido el presidente en funciones, Pedro Sánchez, desde hace días.

El Ejecutivo español no dio importancia al lenguaje sino a que la ayuda humanitaria llegue a Gaza. Las fuentes defendieron, no obstante, que el primero que habla de este concepto es Sánchez, al tiempo que insiste en la defensa de los dos Estados como la vía más factible para la paz y que además España ve más cercana casi que nunca en este momento. Así, el presidente ha insistido en la celebración "en seis meses" de una conferencia de paz entre Israel y Palestina precisamente en España, para dar un horizonte concreto a la resolución del conflicto.

Estas conclusiones dan una respuesta a lo urgente y a lo importante

El presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, aseguró que "la unidad es nuestra fuerza" como Unión Europea, y desde Moncloa celebraron el acuerdo. "Estas conclusiones dan una respuesta a lo urgente y a lo importante", resumieron, al tiempo que añadieron que los puntos "ofrecen una perspectiva para alcanzar una solución al conflicto" mediante la "materialización de los dos Estados". Asimismo, acogieron de muy buen grado la opción de una conferencia de paz, a propuesta precisamente de España.

Ya antes de la cumbre, el propio Michel aseguró que los 27 tienen que evitar los "dobles raseros" respecto a la situación entre Israel y Palestina. "Algunos en el mundo usan estas circunstancias para unir a parte de la comunidad internacional para atacar a la UE y generar dudas sobre nuestra credibilidad", sostuvo el dirigente belga, al tiempo que apoyó al secretario general de la ONU, Antonio Guterres, tras las críticas recibidas por parte del Gobierno israelí.

La presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola, expresó por su parte que la Eurocámara "ha demostrado que se puede tener una posición unida para denunciar los ataques de Hamas y denunciar la situación humanitaria en Gaza", porque ambas cosas, reiteró, "no son excluyentes". La dirigente maltesa añadió que es "importante lanzar un mensaje de unidad" como el que se ha visto en otras situaciones similares, como la invasión rusa de Ucrania. 

Metsola, de hecho, pidió a los líderes que tomaran nota de la posición del Parlamento, y también de su lenguaje. "Mi llamamiento será a no subestimar lo difícil y delicado que fue adoptarlo, pero lo hicimos, y pedimos a otras instituciones que se fijen en ese lenguaje", expuso. Otros dirigentes como el canciller alemán Olaf Scholz o la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, también eran optimistas sobre el acuerdo, y esta última incluso defendió una posible mediación de la UE en el conflicto a medio plazo.

Zelenski y Ucrania, en un segundo plano

Ucrania también ha estado en la agenda de los líderes, y el encuentro de hecho se dio en paralelo al anuncio del nuevo primer ministro eslovaco, Robert Fico, que comunicó el final de la ayuda de su país a Kiev, algo que ya había avisado en campaña. Quien celebró este paso de manera implícita fue el líder húngaro, Viktor Orbán, que se vio la semana pasada con Vladimir Putin en Pekín. "Yo tengo una estrategia de paz", aseguró ante los periodistas el primer ministro magiar, equiparando el conflicto entre Israel y Hamás con la invasión rusa. 

"¿Apoya un alto el fuego?", le preguntaron los periodistas a Orbán. "Entre Rusia y Ucrania sí", respondió rápidamente, después de defender abiertamente su encuentro con el presidente ruso. "Tenemos una política clara y transparente que se diferencia de la de la mayoría. Tenemos que hacer todo para tener paz. Por eso mantenemos todas la líneas de comunicación con los rusos, sino no habrá oportunidad para la paz", resumió. Además, esta es la última cumbre de otro de sus grandes socios hasta ahora, Mateusz Morawiecki, que dejará el testigo al frente de Polonia para Donald Tusk en las próximas semanas, a tenor del resultado de las últimas elecciones.

El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, también intervino al inicio de la cumbre. No quiere que la Unión Europea se olvide de que Rusia sigue invadiendo Ucrania mientras ahora todos los focos se ponen en la guerra entre Israel y Hamás. Kiev mantiene que la adhesión al bloque comunitario es uno de sus grandes objetivos para el corto y el medio plazo, y así se lo hizo saber este jueves el presidente a los líderes de los 27. "Incluso a pesar de la guerra a gran escala, no pedimos excepciones a las normas generales", expuso Zelenski sobre la entrada.

Tuvo Zelenski en este sentido un mensaje para los Estados miembros, que son los que tienen la última palabra sobre la adhesión. "Contamos con su unidad en respuesta a la decisión de iniciar negociaciones sobre la adhesión de Ucrania a la Unión Europea. Esta decisión será una de las más fuertes de esta década y determinará en gran medida el camino futuro" de la Unión, sostuvo. Es casi una decisión al todo o nada, en palabras del propio presidente. "O gana toda nuestra Europa -junto con Ucrania, junto con Moldavia, y en el futuro junto con Georgia y Bielorrusia- o ganará el pasado. Estoy seguro de que todos ustedes están del lado de la Europa moderna", concluyó, con un mensaje implícito sobre la Rusia de Vladimir Putin.