El bailaor Rafael Amargo ha ingresado en los calabozos de la Audiencia Provincial de Madrid, por riesgo de fuga ante el "quebrantamiento reiterado" del compromiso de firmar semanalmente en el órgano judicial. De allí, Amargo será trasladado a la prisión de Soto del Real (Madrid).
Amargo se enfrenta a nueve años de prisión por distribuir metanfetamina y otras sustancias desde su casa en el céntrico barrio madrileño de Malasaña. En los registros, los agentes encontraron 100 gramos de metanfetamina, 40 gramos de ketamina y tres botes de popper, entre otras sustancias. El bailarín aseguró que se dedicaban a vender pequeñas cantidades a conocidos, pero que en los últimos tiempos se había "ampliado el negocio".
Su abogado, Jaime Caballero, ha dicho en Así es la vida, que el motivo de esta prisión provisional es que su cliente no ha ido a firmar al juzgado unas cuatro veces este año, por razones de salud, como ansiedad y estrés, y que estaban a la espera de los papeles que justificaban esta ausencia.
El bailarín se encuentra "sorprendido y defraudado por la medida", según el abogado. Lleva tres años sin pasaporte y ha estado trabajando por lo que difícilmente, alega el letrado, se quiere o puede irse de España.
Amargo está a la espera de juicio, que será previsiblemente en abril del año que viene. El bailaor, que contrató en su momento a la sobrina de la reina, Carla Vigo, para hacer Yerma, dice estar en la confianza absoluta de salir absuelto.
Durante el juicio del bailaor, también serán procesados su productor teatral, Eduardo de Santos, y otro hombre llamado M. Ángel Batista León.
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