Así es el schipperke, conocido como el ‘pequeño capitán’ en idioma flamenco, un perro ágil con instinto guardián

Este canino de tamaño compacto y carácter intrépido se origina en las ciudades de Bruselas y Lovaina, en Bélgica. La primera mención a esta raza aparece en el siglo XV en los escritos de un monje llamado Wenceslao, y parece que ya entonces era un perro muy popular en el gremio de artesanos en las ciudades belgas, especialmente entre los zapateros.

En 1690, los zapateros de Bruselas comenzaron a organizar desfiles donde presentaban sus destrezas profesionales, y entre ellas, destacaban los elaborados collares de latón y cuero cincelado para perros que exhibían en sus schipperke, entonces llamados spitske. Algunos de esos collares pueden verse en la actualidad en museos de Bélgica y Reino Unido.

Era un perro reconocido por su habilidad para cazar roedores y cualquier otro animal de pequeño tamaño que pudiera estropear las mercancías, por lo que el schipperke también se comenzó a hacer popular en los barcos y puertos.

Y es debido a su carácter bravucón y valiente que, cuando se funda el primer club de la raza en 1888, se rebautiza con el nombre que conserva hoy, que traducido del idioma flamenco significa ‘pequeño capitán’.

Gozó de una época de popularidad en el siglo XIX gracias a la reina María Enriqueta de Austria, esposa de Leopoldo II, quien adquirió un schipperke que se convirtió en el ganador absoluto de la exposición canina de 1885.

Estudios de ADN de las razas caninas han mostrado que el schipperke está emparentado con los pomeranias y por lo tanto con las razas tipo spitz, pero pese a estos resultados genéticos, asociaciones caninas de la magnitud del Kennel Club americano, discrepan y sostienen que el schipperke no tiene relación con los spitz y que procede del extinto leauvenaar, una raza belga de mayor tamaño que también se encuentra detrás del desarrollo del pastor belga groenendael.

La población y demanda de schipperke ha caído drásticamente en todo el mundo y se considera una raza canina vulnerable de extinción, lo que ha generado esfuerzos por parte de los clubes de la raza para darle un impulso y mayor notoriedad, como el Versatily Awards, espectáculos de agility y obediencia realizados exclusivamente por schipperke para resaltar los talentos y versatilidad de la raza.

Pequeñas "piezas de dinamita"

Descritos como 'un perro grande en un cuerpo pequeño', el schipperke muestra todos los rasgos que se espera de un gran perro: son valientes, protectores y muy devotos con su núcleo familiar.

Atléticos, resistentes y además con buena predisposición para el entrenamiento, son capaces de realizar un gran número de actividades caninas. Criadores y expertos en la raza advierten que los schipperke no son conscientes de su pequeño tamaño, y que no se dejan intimidar fácilmente, lo que se puede convertir en situaciones problemáticas si un perro más grande se acerca con actitud hostil.

Hacen gala de mucha personalidad y tienen una naturaleza curiosa. Se les considera una raza sociable y apta para la convivencia con niños y otros animales, pero debido a su fuerte instinto protector y guardián, es necesario realizar una introducción adecuada si se incorpora otro miembro, humano o no, en el hogar.

En cuanto a su pelaje, el schipperke presenta una capa corta y doble, mudando una vez al año. A pesar de esto, muestran un bajo desprendimiento de pelo, lo que facilita su mantenimiento para aquellos que buscan una raza con necesidades moderadas en términos de cuidado del pelaje. Destacan por poseer una gorguera más abundante y mayor cantidad de pelo en las patas traseras, conocido en el mundo canino como ‘culottes’. El único color admitido en el estándar es el negro zaíno.

En materia de salud, cabe destacar que la raza del schipperke enfrenta problemas significativos debido a su fuerte carga endogámica. Ante la aparición de algunas mutaciones genéticas que solo afecta a los schipperke, se han establecido pruebas específicas para detectar estas enfermedades por parte de los criadores y propietarios.

Para ampliar información, se recomienda contactar con el Royal Schipperke Club, con sede en Bélgica o el Schipperke Club de Reino Unido, ya que en España no existe ningún criadero en activo ni club oficial de la raza.

Proponemos que se valore la adopción responsable y se dé una oportunidad a alguno de los perros que se encuentran esperando un hogar y una familia en perreras, protectoras y redes de difusión.

Referencias: