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Meghan Markle y el Príncipe Harry reaparecen en un partido de hockey

Meghan Markle y el príncipe Harry, en Sudáfrica en 2019.
Samir Hussein/WireImage/Getty

Meghan Markle y el príncipe Harry han vuelto a la primera línea y, además lo han hecho por sorpresa, con un viaje inesperado a la Columbia Británica, una provincia situada al oeste de Canadá. Una vez allí, han asistido al último partido de hockey entre los Vancouver Canucks y los San Jose Sharks.

El encuentro lo vencieron los locales por 3 a 1, lo cual fue una victoria celebrada por los duques de Sussex en la zona VIP del estadio. Además, y como curiosidad, fue el hijo de Carlos III de Inglaterra quien realizó el saque de honor dejando caer el disco, igual que había hecho su abuela, Isabel II, 21 años antes —ambos partidos fueron contra los Sharks y ambos los ganaron los Canucks—.

Harry y Meghan, que asistieron conjuntados vestidos completamente de negro y sin sus hijos, Archie y Lilibet, aplaudieron y animaron al equipo de Vancouver e incluso se animaron a bailar, durante el descanso, con los éxitos que ponía el DJ del Rogers Arena.

No hay que olvidar que el matrimonio vivió allí una época inmediatamente después de que tuviese lugar el Sussexit en el año 2019, cuando se desvincularon de la familia real británica, y poco antes de volar hacia el sur e instalarse definitivamente en su mansión en Montecito, en California, ya en Estados Unidos.

De todas formas, su regreso sorpresivo a Canadá tenía una función promocional, ya que el príncipe está apoyando sus Invictus Games, los juegos que él mismo creó para veteranos de guerra, y cuya siguiente edición tendrá lugar en febrero de 2025 entre Vancouver y Whistler, una ciudad cercana a la capital de la provincia.

Todo ello, además, supuso la reaparición de los duques después de la polémica por la videollamada para felicitar al rey Carlos III en su reciente cumpleaños, cuando sopló 75 velas el pasado 14 de noviembre. Asimismo, ambos están trabajando en nuevos proyectos para continuar con su labor filantrópica después del final de su contrato millonario con Spotify.

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