Internacional

Al menos dos muertos tras la explosión de un coche en un puente de la frontera entre EEUU y Canadá

Un vehículo ha explotado este miércoles en un puente sobre la frontera entre Estados Unidos y Canadá, a la altura de las Cataratas del Niágara. Al menos dos personas han muerto tras la explosión y una tercera ha resultado herida, según ha informado el diario local Niagara Gazzette. Por el momento se desconoce si el suceso ha sido provocado o si se trata de un accidente, aunque EEUU no ha encontrado evidencias de terrorismo.

Tanto la cadena CNN como FoxNews coinciden en que la explosión fue provocada por un coche bomba y el líder de la oposición canadiense Pierre Poilievre ha calificado el suceso como un "atentado terrorista". Las autoridades estadounidenses investigan la explosión ocurrida, sin embargo, las primeras declaraciones no han hecho mención al  móvil terrorista. 

La gobernadora del estado de Nueva York, Kathy Hochul ha sido contundente: "Basándonos en lo que sabemos en este momento, y repito que todo puede cambiar, no hay señales de actividad terrorista con respecto a este choque".

Posteriormente, el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, se sumó a esas declaraciones a través de redes sociales, explicando que tras consultar con Hochul, con funcionarios de EE UU y de Canadá, "no hay indicación de una amenaza relacionada con este incidente".

Al parecer, el vehículo que explotó estaba tratando de entrar a Estados Unidos desde Canadá por el puente Rainbow, que se levanta sobre las famosas cataratas. Según ha relatado el citado diario, el vehículo aceleró, derribó una valla de separación entre los dos sentidos e instantes más tarde se sintió la explosión. Sin embargo, este medio no ha dicho que se tratara de un coche bomba.

Por su parte, The New York Times ha informado que, según la investigación preliminar, el coche no contenía explosivos. Los investigadores citados por el medio consideran que la explosión pudo haber sido producto del impacto de la colisión. Las mismas fuentes también indicaron que cerca del vehículo fue encontrada una maleta que tampoco contenía explosivos.

Según FoxNews, las dos personas fallecidas eran los ocupantes del vehículo que explotó, mientras que el diario local Niagara Gazzette afirma que la persona herida es un agente fronterizo. Según han indicado las autoridades canadienses, tanto el Rainbow como otros tres puentes que unen a Estados Unidos con Canadá, se encuentran cerrados en ambos sentidos. También se han tomado medidas de seguridad adicionales "en todos los pasos fronterizos del país".

Tanto el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, como el ministro de Seguridad Pública, Dominic LeBlanc han dicho que "la situación es muy grave". Trudeau también ha expresado que se encuentra en contacto permanente con las autoridades estadounidenses para "seguir recibiendo información y trabajar en esta situación tan grave". Por su parte, LeBlanc indicó que no puede dar más detalles de lo sucedido porque "la situación está evolucionando rápidamente" y las autoridades han recibido informaciones contradictorias. El Gobierno de Joe Biden todavía no se ha pronunciado al respecto.

"Me han informado sobre la situación ocurrida en el Rainbow Bridge en Buffalo", ha indicado Hochul, que ha asegurado además que la Policía del estado trabaja activamente con la Fuerza de Tarea Conjunta contra el Terrorismo del FBI para vigilar todos los puntos de entrada a Nueva York. "Las agencias estatales están en el lugar y listas para ayudar", ha añadido.

"Viajo a Buffalo para reunirme con las autoridades y los servicios de emergencia y actualizaré a los neoyorquinos cuando haya más información disponible", ha afirmado Hochul en su cuenta de X, antes Twitter. Mientras, desde el Gobierno federal en Washington se ha comunicado que el presidente, Joe Biden, "había sido informado" y que él y su equipo seguían de cerca las investigaciones.

El medio local Buffalo News cita a "una fuente con conocimiento de lo sucedido" y asegura que el chófer del vehículo siniestrado entró en el puente a gran velocidad e invadió una calzada del sentido contrario, antes de colisionar con una barrera puesta por el Servicio de Aduanas y explotar. Un vídeo que comenzó a circular muestra el coche, de color blanco, entrando en la zona fronteriza a toda velocidad, y un testigo citado por los medios canadienses asegura que iba "a 200 kilómetros por hora".

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