El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha criticado que la portavoz del PSOE en el Ayuntamiento, Reyes Maroto, dé lecciones de convivencia y ha afirmado que la legislatura se le hará larga. "Keep calm y mucha fruta", le ha recomendado.
En el Pleno ordinario del Ayuntamiento de Madrid, después de que Maroto le preguntara al Gobierno municipal por las medidas que va a adoptar por los actos violetos que se están produciendo en las manifestaciones de la calle Ferraz, el alcalde ha respondido a la portavoz socialista que el exalcalde Enrique Tierno Galván "no hubiera votado a favor de la amnistía".
"Mi modelo de convivencia pasa por condenar tajantemente los incidentes minoritarios que se han producido en las calles de Madrid. Mi modelo de convivencia pasa por no amnistiar terroristas, golpistas ni corruptos. El suyo pasa por aliarse con los herederos de ETA, pasa por aliarse con los golpistas que incendiaron las calles de Barcelona", ha censurado.
Así, con una fotografía de los incidentes producidos en octubre de 2019 en Barcelona, Almeida le ha recordado a Maroto que los culpables de estos incidentes son "a los que van a amnistiar por un delito de terrorismo".
También, el regidor le ha pedido a la izquierda que diga que Hamás es "un grupo terrorista y hay que condenarlos sin paliativos". "Porque si no, su modelo de convivencia, el del Partido Socialista, pasa por aliarse y por ser socios de los que mataron a más de 1.000 personas en Madrid e incendiaron tantas casas del pueblo, de los que cometieron delitos de terrorismo en Barcelona y a los que van a amnistiar, y a aquellos que hace tres semanas o cuatro, desde luego dejaron imágenes espeluznantes de una masacre en Israel", ha asegurado.
Tras todos estos reproches, el alcalde ha terminado su discurso haciendo alusión a la presidenta de la comunidad, Isabel Díaz Ayuso: "Keep calm y mucha fruta", le ha espetado a Maroto. Para conocer el origen de esta frase hay que echar la vista atrás hasta la primera sesión del debate de investidura de Pedro Sánchez. En esta, Ayuso, en respuesta a unas declaraciones del presidente sobre Casado y un posible cargo de corrupción, reaccionó profiriendo lo que se interpretó como un insulto (hijo de puta). En un primer momento, desde el equipo de la presidenta ironizaron con que lo que había dicho era "me gusta la fruta".
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