Fabien, el repartidor que encontró a Alex Batty en Francia: "Al principio fingió llamarse Zach, luego me contó su historia"

En cuestión de pocos días, la vida de Fabien Accidini, un estudiante de Toulouse de 26 años que trabaja como repartidor de medicamentos en el suroeste de Francia, ha dado un giro radical, como lo ha dado también para Alex Batty, el adolescente británico que llevaba seis años desaparecido y al que localizó caminando por una carretera de esa zona montañosa de los Pirineos franceses.

El pasado miércoles por la noche, Accidini iba haciendo su ruta de repartidor entre dos farmacias ubicadas cerca del pueblo de Chalabre, en el departamento francés de Aude, cuando se encontró con el joven. "Iba caminando mientras caía una fuerte lluvia, y decidí ofrecerme a dejarlo en algún lugar", ha contado al medio francés La Dépêche du Midi.

Tras el ofrecimiento de Accidini, el adolescente aceptó subirse con él al vehículo. "Era bastante alto y rubio, y vestía vaqueros negros, un jersey blanco y una mochila. También llevaba un patinete bajo el brazo y una linterna", describe el repartidor, que también es estudiante de quiropráctica.

En un primer momento, Batty no desveló su verdadera identidad. "Durante los primeros minutos parecía un poco tímido. Intentamos hablar en francés, pero noté que no dominaba el idioma. Decidí comunicarme en inglés. Cuando le pregunté su nombre, fingió que se llamaba Zach y luego continuamos charlando", ha explicado Accidini.

La timidez inicial desapareció al poco tiempo, según Fabien Accidini, quien ha revelado que hablaron durante más de tres horas: "Muy rápidamente, me dio su verdadera identidad, luego me contó su historia".

Batty le dijo entonces que su madre lo había secuestrado en 2017, cuando tenía 11 años, y que había vivido en España "en una casa de lujo con unas diez personas". Posteriormente, el joven habría llegado a Francia hacia el año 2021, según le indicó Batty a Fabien. 

"No tenía ninguna animosidad hacia su madre, pero sí muchas ganas de encontrarse con su abuela, extrañaba mucho a sus seres queridos", aseguró Accidini. Es por eso que "a mitad del fin de semana decidió dejar a su madre para reunirse con su familia en Inglaterra. Había estado caminando por la montaña durante más de cuatro días", agregó.

Gracias a este estudiante, Alex Batty pudo comunicarse de inmediato con su abuela, quien tiene la custodia del menor, al enviarle un mensaje a través de Facebook: "Hola abuela, soy yo, Alex. Estoy en Francia, en Toulouse. Espero que recibas este mensaje. Te amo, quiero volver a casa". 

Alex Batty desapareció en Málaga a finales de septiembre de 2017 durante unas vacaciones con su madre, Melanie Batty, que no tenía la tutela parental, y su abuelo, David Batty. El joven, que en aquel momento tenía 11 años, debía regresar a Inglaterra días después, el 8 de octubre, pero nunca lo hizo. Desde entonces, la abuela y tutora legal del niño, Susan Caruana, vivía con la angustia de no saber nada de él.

Tras hablar con el joven, Fabien Accidini llamó a la Policía para explicarles la situación. Según este estudiante y repartidor, Alex Batty "no se arrepentía" de haber dejado la comunidad en la que vivía con su madre y su abuelo, "solo quería vivir una vida normal, ver a su abuela nuevamente y tener un futuro 'normal', esa es la palabra que usó", apunta Accidini.

Los servicios sociales franceses se han hecho cargo del menor antes de ser trasladado a Inglaterra para reunirse con su abuela, que espera impacientemente volver a verle. "No sé cómo expresar mi alivio y felicidad de que Alex haya sido encontrado sano y salvo. Lo principal es que esté a salvo, después de lo que sería una experiencia abrumadora para cualquiera, y más para un niño", ha manifestado la abuela a través de un comunicado difundido este viernes por la Policía de Manchester.