Costumbrismo Digital por Juan Luis Saldaña

Estamos abusando de la preposición “desde” para explicar un estado de ánimo y, en general, para emitir una crítica o un comentario sobre alguien. Dice la RAE que esta palabra se utiliza para hablar sobre un punto geográfico o temporal como, por ejemplo, desde Barcelona o desde 1965 y recomienda también utilizar la palabra “en” cuando se pueda. Es mejor decir “en la Moncloa se confirma la noticia” que “desde la Moncloa se confirma la noticia”. También admite que se use para introducir la perspectiva, el enfoque, el aspecto o la opinión que se expresan con fórmulas como “desde la perspectiva histórica” o “desde mi punto de vista”.

Sin embargo, hay un uso insoportable de esta palabra que se da en la cursilería y en la pedantería de esas personas que te hablan “desde el cariño”, en una compleja metáfora espacio temporal de dudosa corrección que los lleva en todo su ser a habitar, según parece, el cariño, allá donde esté. Irse a opinar al respeto es también una moda muy practicada porque son muchos los pesados que te hablan “desde el respeto”. La preposición “con” nos quita toda la tontería de un plumazo si lo que queremos es hablar con cariño o con respeto.

Irse a opinar al respeto es también una moda muy practicada porque son muchos los pesados que te hablan “desde el respeto”. 

Se me ocurren una serie de palabras malsonantes en las que la preposición “desde” funcionaría a las mil maravillas. No las escribo aquí por respeto a mis lectores y a la gente de bien, pero la imaginación de cada uno es más potente que el talento de este articulista, así que ahí queda puesta la semilla para que germine en las mentes abonadas de la gente inteligente.

Hay una nueva forma de uso de la preposición “desde” que me tiene también emocionado y que se repite mucho. Es una fórmula que ha calado y que sirve para mostrar la propia humildad ante un suceso, aunque, de paso, se muestran otras cosas. La fórmula es esta: “Hablo desde la más absoluta ignorancia”. Por desgracia, la citada coletilla “desde la más absoluta” se expande como un virus y ya se pueden leer y escuchar variantes como “desde la más absoluta visceralidad” o “desde la más absoluta desvergüenza”. Suma y sigue.

Veo que el disco póstumo del cantante Peret se tituló “Desde el respeto”, algo más entendible si hablamos de arte y también encuentro una canción del grupo de punk alavés Gatillazo, fundado por el mítico Evaristo, que se titula “Desde el cariño” y cuya escucha y lectura de letra dejo también a la voluntad de los amables lectores. Tenemos “desde” hasta en la sopa y vamos a acabar de estas expresiones ridículas hasta el lugar del mismo nombre que el otro grupo del mítico Evaristo. Desde mi casa, con cariño.