Carlos Cuerpo ha jurado este viernes su cargo como ministro de Economía tras la marcha de Nadia Calviño al Banco Europeo de Inversiones. En su primera comparecencia el pacense ha querido recordar los orígenes humildes de su familia, con un abuelo nacido en los años 20 del siglo pasado que "tuvo que empezar a trabajar con nueve años" y, por ello, "no pudo acceder a educación". 

También el de sus padres, que cuando él tenía nueve años emigraron a Suiza en busca de oportunidades y una vida mejor. "Se lo debo a mi familia y a esas nuevas generaciones que tienen que tener las oportunidades que nuestros mayores no pudieron disfrutar y a los propios mayores que nos han traído hasta aquí", comentaba en la comparecencia.

"La obsesión de mi abuelo fue poder dar a sus hijos la educación que él no pudo tener. Con esa fuerza envió a mis tíos al colegio y así pudieron gozar del privilegio que es la educación", narraba visiblemente emocionado el nuevo ministro. 

Calviño, en su discurso de despedida: "Me voy con la sensación de misión cumplida; paso el testigo a dos personas extraordinarias"

"Ahora nos encontramos en un momento donde el peso de tomar las decisiones que afectarán a nuestros hijos comienza a recaer en mi generación. A estas alturas de la historia, casualidades de la vida, os podéis imaginar la edad que tiene mi hija Cristina, nueve años", ha continuado.

"Tengo la convicción que las cosas van a salir bien por la sencilla razón de que no podemos fallar", continuaba Cuerpo. Para finalizar ha querido agradecer a Nadia Calviño "por el conocimiento transmitido", a Pedro Sánchez. El ministro ha acabado dirigiéndose a su madre bromeando con que, como podía verse "no era una inocentada".