La actriz Carrie Bernans se encontraba en un restaurante de Manhattan el pasado día 31 celebrando el cambio de año, cuando un coche al que perseguía la policía se empotró contra él. El brutal suceso terminó con nueve personas heridas, entre ellas, la actriz de películas como Vengadores y Black Panther.
Carrie fue ingresada en un hospital de la ciudad e intervenida de múltiples fracturas y traumatismos, especialmente sufridos en el rostro.
El conductor del vehículo implicado se dio a la fuga, aunque fue posteriormente detenido por la policía, según han publicado The Mirror y la madre de la actriz.
Esta, Patricia Lee, ha pedido a los admiradores de su hija que recen por su recuperación definitiva. "Todavía tiene mucho dolor y no puede responder a las llamadas", ha dicho la madre de Carrie, aunque señala que agradece mucho los gestos de cariño que está recibiendo.
El llamamiento más curioso de Lee lo ha hecho sobre clínicas dentales de Atlanta y Los Ángeles a las que pueda acudir su hija para reconstruir su dentadura una vez esté recuperada. Patricia da las gracias a todas las personas que intervinieron en el rescate de su hija tras el suceso.
También ha mostrado duras imágenes del estado en que ha quedado el rostro de Carrie, notablemente desfigurada por el impacto del atropello., tanto en su boca, como en los pómulos y los ojos. Asimismo, la actriz permanece postrada en una cama con collarín y conectada a distintas vías.
Carrie tuvo un niño hace escasos meses, que afortunadamente no acompañaba a su madre en tan trágica noche.
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