OPINIÓN

El negocio de las mascotas

Veterinario examinando los ojos de un perro.
Veterinario examinando los ojos de un perro.
Tima Miroshnichenko / Pexels
Veterinario examinando los ojos de un perro.

Los perros son unos seres vivos cargados de nobleza. Los gatos te enseñan cuales son las distancias necesarias para la convivencia. Los loros demuestran una inteligencia sorprendente. Las mascotas hacen mejor la vida en un hogar. Por mucho que haya gente a la que no le guste, totalmente respetable, vivir con un animal te enseña muchas otras cosas que la rutina no alcanza. Y no es cuestión de distinguir entre las personas que viven en entornos urbanos o rurales.

Creo que ambos deben ser escuchados por la visión que pueden aportar a la sociedad, y que al igual que el urbanita debe aprender cómo funciona la naturaleza salvaje con sus puntos más crueles, muchos habitantes alejados de las ciudades pueden extraer conclusiones sobre cómo avanza la ciudadanía en el ámbito de las mascotas, especialmente esa que vive alejada del animalismo y que es la mayoritaria.

Vivimos unos tiempos donde en nuestro país hay más perros que niños menores de 14 años. Un dato que refleja una tendencia por la que muchos no han pasado desapercibidos. Cada vez hay más clínicas veterinarias, más tiendas de piensos, más espacio en los lineales de las cadenas de hipermercados repletos de accesorios o más recintos en los que poder soltar a las mascotas tranquilamente y encontrar un equilibrio entre peatones y canes.

Los negocios de este sector proliferan con hoteles, apartamentos, medios de transporte, bares, restaurantes, tiendas de ropa o lugares de trabajo que aceptan personas acompañadas de seres peludos.

Es impresionante el avance social que se ha ido conquistando en poco más de una década en este país. Un lugar señalado en el mundo por el maltrato que ocurre en muchos festejos populares. El tiempo irá jugando su papel en esta cuestión.

Pero, aunque mascotas ha habido desde hace milenios, lo cierto es que, si salimos del error de la "humanización" del animal, nos encontramos con unos ciudadanos que han desarrollado una empatía mayor a la que existía anteriormente en otras generaciones. Y eso se refleja en los hogares y, por supuesto, en los negocios. Ah, y los políticos también han detectado ese caladero de votos: desde el Congreso, a las autonomías y hasta los alcaldes. Muchos dirigentes con ideologías contrapuestas a los que une el amor por un animal.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento