Reducción del 13,8% de las víctimas mortales en accidentes de tráfico en las carreteras catalanas en 2023

Imagen de un coche después de un accidente a principios de este año.
Imagen de un coche después de un accidente mortal en Cataluña a principios de este año.
ACN
Imagen de un coche después de un accidente a principios de este año.

El año pasado, la mortalidad en las carreteras catalanas se redujo un 13,8% a 2019, según el informe sobre la siniestralidad en las carreteras catalanas del 2023, presentado este martes en el Consell Executiu. El conseller de Interior, Joan Ignasi Elena, ha expuesto al Govern que  en 2023 murieron 150 personas en 134 accidentes mortales en la red viaria interurbana catalana.

Según las cifras del informe presentado por Elena, 53 víctimas mortales eran motoristas. Al mismo tiempo, también se refleja que se consolida la disminución del 37,5% de las víctimas mortales en la AP-7 respecto al año anterior.

El informe sobre accidentes en las carreteras catalanas del 2023 compara sus cifras con 2019 porque este año es el que sirve de referencia para el cumplimiento de los objetivos de reducción de la siniestralidad del Plan de Seguridad Vial 2020-2023.

Red viaria

Aunque las víctimas mortales en la autopista AP-7 se hayan reducido un 37,5% respecto a 2022, esta vía catalana sigue siendo la que acumula más siniestros mortales en 2023, con 15 fallecidos. En 2022 se produjeron 24 muertos por accidentes de tráfico en la AP-7. La cifra de muertes de este año es la misma que la de 2019, antes de la liberación de los peajes y el aumento de circulación que ha comportado.

El resto de vías con mayor siniestralidad se distribuye en las siguientes carreteras: en la A-2 murieron 8 personas; en la N-II, 7 víctimas; en la N-340, 6 muertos; y la C-32, C-37 y C-55 registraron 5 muertes cada una. Todas estas carreteras presentan reducciones de siniestros respecto a 2019, siendo la A-2 la vía que presenta una mayor reducción con un descenso del 50% de las víctimas mortales, pasando de 16 a 8 personas fallecidas.

Colectivos vulnerables

Una tercera parte de los muertos en las carreteras catalanas en el 2023 eran motoristas. Concretamente, 53 víctimas mortales circulaban en moto. Esta cifra es mayor que el registro del año pasado, cuando murieron 44 motoristas. En comparación con el año de referencia para el cumplimiento de los objetivos de reducción de la siniestralidad del Plan de Seguridad Vial 2020-2023, también se han incrementado las víctimas mortales en moto ya que en 2019 murieron 48 motoristas.

En cuanto al conjunto de colectivos vulnerables, motoristas, peatones y ciclistas, suman casi la mitad de víctimas mortales en las carreteras catalanas, un 45%. Este 2023 han muerto también 12 peatones y 4 ciclistas. En relación al año pasado, esto representa una ligera reducción en cuanto a los ciclistas, dos víctimas menos, y siete muertes menos en el caso de los peatones.

8 de cada 10 víctimas son hombres

De las 150 víctimas mortales registradas este año en las carreteras catalanas, el 80 por ciento son hombres. Por edad, la franja que concentra a más víctimas mortales es la de 35 a 44 años. Además, el rango de 45 a 54 años es el que ha registrado un mayor incremento, de un 29%, respecto al año pasado.

Si se analizan las muertes por tipos de día de la semana, el 48% se produjo en día laborable y el 52% en fin de semana o festivo. En este sentido, la probabilidad de sufrir un accidente mortal es mayor en fin de semana o festivo, sobre todo en domingo.

Nuevo Plan de Seguridad Vial

Durante este primer trimestre de 2024 se aprobará el nuevo Plan de Seguridad Vial de Cataluña 2024-2026, que recogerá propuestas de los diferentes departamentos implicados. El departamento de Interior impulsará cuatro grandes líneas estratégicas de actuación en este Plan de Seguridad Vial.

Una primera es la instalación en todo el territorio de infraestructuras de gestión de tráfico, seguridad vial y movilidad sostenible, para reducir la siniestralidad en la red viaria de Cataluña. Esta medida contará con una inversión de 60 millones de euros en los próximos 3 años.

Otra línea estratégica es promover la formación continua a lo largo de la vida de los conductores a través de las autoescuelas, los centros de formación y los centros de reconocimiento médico. Una tercera línea pretende establecer una nueva estrategia de control de la siniestralidad y la movilidad con estrategias dinámicas en el control de la velocidad, emisiones y distracciones.

Finalmente, la cuarta línea estratégica que quiere impulsar el departamento de Interior es la colaboración con el tejido asociativo y con los entes locales para la reducción de la siniestralidad, la formación de la ciudadanía y la atención de las víctimas de tráfico.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento