Los humanos necesitamos dormir entre 7 y 8 horas al día para funcionar correctamente, sin embargo, los animales no humanos del mundo tienen necesidades muy diferentes y muestran gran variedad de hábitos a la hora de dormir.
Los murciélagos son muy dormilones y pueden alcanzar las 20 horas de descanso, pero los elefantes apenas duermen 2 horas al día, echando ‘cabezaditas’ esporádicas. Las mariposas, por su lado, no duermen exactamente tal como lo entendemos, sino que se limitan a descansar, quedándose inactivas. Y si vamos al mundo marino, los pulpos entran en la fase de sueño aproximadamente un minuto cada hora.
El sueño es una necesidad vital para todos los animales, incluidos los humanos, que nos ayuda a descansar y a recuperarnos de las actividades del día. Pero hay un animal terrestre en el mundo que nos supera a todos los demás a la hora de dormir.
Conservación de energía
Los koalas pasan entre 18 y 22 horas al día durmiendo. Esto se debe a que su dieta es muy baja en nutrientes, por lo que necesitan dormir mucho para conservar energía. Las hojas de eucalipto, su alimento principal, son muy difíciles de digerir y proporcionan muy pocas calorías.
Los koalas son marsupiales que viven en los bosques de eucaliptos de Australia. Son animales solitarios y forman parte de un grupo muy reducido de mamíferos en el mundo que son capaces de basar su alimentación en hojas. Además del eucalipto, los koalas también comen hojas de muérdago, de acacias y de té. Las hojas de eucalipto son tóxicas para la mayoría de los animales, pero estos marsupiales han desarrollado una resistencia a su toxicidad y pueden comer entre 200 y 500 gramos de hojas al día.
En el caso de los koalas, el sueño es esencial para su supervivencia. Gracias a su largo período de sueño, los koalas pueden conservar energía y almacenar nutrientes para cuando los necesitan.
Otros animales dormilones
Además de los koalas, hay otros animales terrestres que también duermen mucho. Entre ellos se encuentran los perezosos, que duermen entre 15 y 20 horas al día; las zarigüeyas, que duermen entre 15 y 20 horas al día; y las serpientes pitón, que duermen entre 18 y 20 horas al día.
Es curioso observar que, según estudios, los animales que pasan más tiempo durmiendo no siempre tienen un sueño más profundo. Por ejemplo, los gatos pueden dormir hasta 16 horas al día, pero su sueño es interrumpido y fragmentado. Por otro lado, los perros duermen menos horas (entre 12 y 14 horas al día), pero su sueño es más profundo y reparador.
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