A pocas semanas de que Patri Pérez y Lester Duque den la bienvenida a su primer hijo, Río, los que fueran participantes de La isla de las tentaciones están afrontando la recta final del embarazo de la mejor manera posible, y más, teniendo en cuenta sus últimas novedades médicas.
La extentadora ha puesto recientemente rumbo a Gran Canaria, el lugar previsto para que nazca su hijo Río, en vistas a que se encuentre en la isla en caso de que se ponga de parto sin previo aviso o surjan algunas complicaciones. Y es que, en cualquier caso, si todo va bien, Patri deberá someterse a una cesárea, según lo que han valorado los médicos.
Y es que la catalana, dado el avanzado estado de su embarazo, va a precisar de unos cuidados especiales, por lo que trasladarse ya a Gran Canaria, donde hay un hospital preparado con todas las comodidades, era lo más prudente. Tal y como ha revelado en Juntos y revueltos, el canal de Mtmad que tiene junto al ex de Marta Peñate, se trata de una decisión asesorada por sus médicos que, finalmente, han decidido que no tendrá un parto natural.
Al parecer, el pequeño se encuentra en posición "podálica", es decir, sentado, por lo que no es viable tener un parto natural. "Es un poco peligroso", ha explicado la influencer, al borde del llanto, abordando los posibles riesgos que podría conllevar para su bebé en caso de verse en la otra tesitura.
"Nos ha costado mucho llegar a este punto. Tengo un poco de miedo", ha expresado Patri, apoyada en su novio. Y es que no es la primera vez que la catalana debe afrontar complicaciones durante su embarazo, pues, anteriormente, sufrió un aborto por el que le pasó muy mal.
Por ello, la extentadora ha reconocido que afronta esta cesárea programa para dar a luz "con muchas ganas y con mucho miedo", si bien asegura que el bebé le ha ayudado a sobrellevar la situación. "Para mí, Río ha significado todo. Me ha dado muchísima ilusión, muchísima fuerza", ha expresado.
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