El compañero de celda del preso que murió el domingo en la cárcel de Brians 1, en Sant Esteve Sesrovires (Barcelona), ha confesado a los funcionarios que ha sido el autor del crimen. En un primer momento el preso no reconoció su agresión, pero finalmente lo admitió, y supuestamente lo mató ahogándolo con una cuerda. Ahora un juzgado se encarga de la causa, y está por ver si el sospechoso reconoce o no ante la jueza el crimen cometido en la Unidad Hospitalaria Psiquiátrica de la prisión El preso fallecido estaba en prisión preventiva por violencia de género, y el sospechoso de matarlo cumplía condena por el asesinato de su esposa y sus dos hijos. El fallecido no pudo defenderse de la agresión, porque usaba una prótesis en la pierna que no llevaba puesta durante la noche. Los funcionarios de la prisión encontraron el cadáver durante el recuento de la mañana, lo que focalizó todas las sospechas sobre su compañero de celda desde el primer momento. La Generalitat ha pedido prudencia ante las causas del fallecimiento y asegura que se ha abierto una investigación policial. Según publica El Caso, el hombre habría fallecido asfixiado por una cuerda y a manos de un compañero preso. En un comunicado, el sindicato UGT ha criticado el déficit de personal en el sistema penitenciario catalán y la falta de medidas de seguridad.
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