Va camino de convertirse en el juicio del año. El próximo 9 de abril Daniel Sancho se sentará ante el juez acusado del asesinato de Edwin Arrieta, cuyo cuerpo, presuntamente, descuartizó y trató de esconder en bolsas de basura.
El equipo de abogados de la familia de Edwin Arrieta compareció el pasado viernes para reclamar "justicia" en el caso y confirmar que se ajustará a la pena que pida el fiscal. "Nadie conoce más el código penal tailandés que la fiscalía de este país. Si se solicita la pena capital, nos adheriremos, aunque no creo que se aplicara, porque lleva años sin hacerse", señaló el abogado Juan Gonzalo Ospina,
Entretanto, la investigación del caso sigue su curso y continúa revelando nuevos detalles. El último, según ha publicado Caso abierto, hace referencia a un informe forense que contradice a la Policía tailandesa.
El pasado 15 de agosto el subdirector del cuerpo, Surakate Hakparn, conocido como Big Joke, presentó como prueba una camiseta agujereada que supuestamente llevaba Arrieta en el momento del asesinato donde se pueden apreciar las cuchilladas que Sancho le habría proporcionado.
Sin embargo, el Centro de Ciencias Forenses de Tailandia no ha encontrado ninguna prueba que ratifique las afirmaciones del subdirector de la policía tailandesa.
El informe forense analiza la camiseta y los cuatro cuchillos que, según Big Joke, Sancho podría haber usado para cometer el crimen. La conclusión es que "no se puede determinar" que se haya utilizado uno de esos utensilios para apuñalar a Arrieta.
Este estudio es importante porque podría determinar que Sancho fuera o no condenado por asesinato premeditado. El hijo del actor Rodolfo Sancho dijo a la Policía que, tras una discusión con Arrieta, el cirujano colombiano cayó y se golpeó en la cabeza. La autopsia reveló que, efectivamente, Arrieta tenía una fractura en el occipital. Sancho insistió en que no utilizó el cuchillo mientras Arrieta estaba con vida, aunque sí admitió haber desmembrado su cuerpo después.
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