Los Mossos d'Esquadra de Igualada (Barcelona) han detenido a tres hombres de 59, 41 y 37 años y una mujer de 31 por presuntamente robar en nueve domicilios de Santa Margarida de Montbui, Igualada, La Llagosta (Barcelona) y Girona, según han explicado en un comunicado este martes.
El grupo actuaba por la mañana, en horario laboral y escolar, y utilizaba la técnica 'bumping' para forzar la cerradura de los domicilios, técnica en la que el ladrón introduce una llave trucada y la golpea con un martillo para abrir la cerradura.
Desarticulem un grup criminal que cometia robatoris amb força a domicilis d’arreu de Catalunya. Utilitzaven la tècnica bumping per forçar el pany. Amagaven les eines a dins la bateria del cotxe o darrere de targetes de crèdit. Detenim 4 persones pic.twitter.com/XJc8cWKY5S
— Mossos (@mossos) March 26, 2024
El jefe de investigación de la comisaria de Igualada, Jordi Casanovas, explica que tenían un método "muy sofisticado", ya que "utilizaban una técnica muy exclusiva con unas llaves fabricadas por ellos mismos y que les permitía flanquear cualquier medida de seguridad".
Robaban colonias, relojes y joyas de alta gama y dinero
El pasado 21 de marzo se realizaron registros en los domicilios de los cuatro presuntos autores -localizados en Reus, Barcelona, Barcelona y Santa Coloma de Gramenet- y se encontraron objetos robados como colonias, bolsos, relojes y joyas de alta gama, aparatos tecnológicos y dinero en efectivo, entre otros.
También se localizaron herramientas especializadas para forzar las cerraduras de las puertas de los domicilios como varias llaves maestras, alicates o marcadores. Algunas de estas herramientas se encontraron escondidas dentro de la caja de plástico donde se ubica la batería del vehículo.
Un plan organizado: todos tenían su papel
Casanovas asegura que cada persona del grupo criminal tenía un papel especial en los robos. La mujer era la encargada de averiguar si dentro del domicilio había alguna persona. Llamaba de forma insistente al interfono y, si no recibía respuesta, accedía al bloque utilizando el método de la radiografía. Entonces subía hasta la puerta y llamaba al timbre para asegurarse de que no había nadie.
Entonces, actuaban dos de los hombres, que forzaban la puerta para entrar. Una vez dentro, "llamaban al tercer integrante, que subía con bolsas para recoger todo el material", detalla Casanovas.
Los detenidos, la mayoría con antecedentes por hechos similares, pasaron a disposición judicial ante el Juzgado en funciones de guardia de Igualada el pasado sábado. La investigación sigue abierta y, según Casanovas, ya se atribuye a los arrestados una veintena de robos en distintos puntos de Cataluña.
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