Al menos 27 muertos en dos ataques a cuarteles de la Guardia Revolucionaria en el sur de Irán
- Desde el ministerio del Interior iraní señalan como responsable al grupo islamista Yeish al Adl.
- La OMS afirma que los vehículos de la ONG de José Andrés estaban "claramente marcados".
Al menos 27 personas, entre ellas once miembros de las fuerzas de seguridad, han muerto este jueves en dos ataques llevados a cabo en cuarteles de la Guardia Revolucionaria en la conflictiva provincia de Sistán Baluchistán, al sur de Irán.
Los choques comenzaron a última hora del miércoles, cuando un grupo de hombres armados irrumpió en las instalaciones policiales de las ciudades de Rask y Chabahar, según ha informado la agencia estatal IRNA.
De acuerdo con las informaciones del medio oficial, los atacantes tomaron rehenes en Chabahar, que fueron liberados tras horas de enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y los atacantes.
En los choques murieron 11 miembros de las autoridades y 10 resultaron heridos, según ha explicado a la televisión estatal el comandante de las Fuerzas Terrestres de la Guardia Revolucionaria, Mohamed Pakpour. Asimismo, indicó que 16 atacantes murieron en los ataques.
De acuerdo con IRNA, en Rask ya han finalizado las confrontaciones, mientras que en Chabahar las fuerzas de seguridad continúan el choque en el cuartel naval.
El viceministro del Interior apuntó como responsable de los ataques al grupo Yeish al Adl, que Teherán considera una organización terrorista.
Yeish al Adl
La región de Sistán y Baluchistán tiene una población mayoritariamente suní y en ella operan grupos extremistas del islam contrarios al Gobierno chií de Teherán, así como bandas de contrabandistas y narcotraficantes.
Uno de ellos es Yeish al Adl, que busca la independencia de la provincia de Sistán Baluchistán y actúa en la porosa frontera entre Irán y Pakistán. Entre otros atentados, reivindicó la autoría del ataque en el que murieron 11 policías en la ciudad iraní de Rask en diciembre.
A finales de enero, Irán atacó con misiles y drones posiciones de Yeish al Adl en territorio de Pakistán, lo que provocó tensiones diplomáticas entre los dos países.
En los últimos meses se han disparado los ataques de grupos insurgentes que Teherán considera terroristas en esta provincia, en especial en las zonas fronterizas con Pakistán.