La Candidatura d’Unitat Popular – Defensem la Terra (CUP) llega a las elecciones del 12M con el objetivo de revertir los resultados a la baja de la última cita con las urnas. Lejos de los más de 300.000 votos obtenidos en 2015, la CUP confía en mantener el número de escaños (9) de la presente legislatura. Para ello, encabeza el proyecto ‘cupaire’ la activista tarraconense Laia Estrada.
Licenciada en Ciencias Ambientales por la UdG y con Máster en Estudios Territoriales y de la Población por la UAB, Estrada (1982) representará a la formación tras ser diputada en el Parlament en la última legislatura y superar a la número 2 de la lista, Laure Vega, en la consulta interna del partido. La de Tarragona no es nueva en la política: tras formar parte de movimientos sociales, en 2012 comenzó a militar en la CUP y ya en 2015 entró en el pleno municipal de su ciudad natal, donde ayudó a destapar el caso Inipro.
Estrada, profesora en un centro para alumnos en riesgo de exclusión social antes de entrar en la política, ha trabajado los últimos años en frenar y evitar que se lleve a cabo el macroproyecto del Hard Rock. De hecho, la nacida en Tarragona ha sido una de las voces más notorias que se han opuesto a la construcción del casino, ya ha denunciado ante la Oficina Antifraude el proyecto.
Estrada ha estado implicada en la defensa de causas sociales desde principios de 2000, formando parte de la Asamblea por la Vivienda o Cau de Llunes, y, tras su llegada al Parlament, también forma parte del comité en Defensa del Delta del Ebro. Una vida dedicada a un activismo que la llevó a estar encausada por el 'caso Bershka'.
En 2009, Estrada, junto a otras activistas de la organización feminista Cau de Llunes, llevaron una protesta sobre el consumismo y la presión estética a las puertas del negocio de moda. Una concentración que generó forcejeos con la Guardia Urbana de Tarragona y acabó con la detención de la ahora candidata a las elecciones catalanas. En 2016, la justicia declaro culpable a Estrada y dos compañeras más y fueron sentenciadas a tres meses de prisión por un delito de atentado contra la autoridad.
Los 'anticapitalistas' llegan a los comicios en un momento de reflexión y redirección. El pasado 28 de octubre, la CUP anunció que iniciaban un proceso interno de debate llamado 'Procés de Garbí' para "marcar el rumbo a seguir" en los próximos años.
Con todo esto, la candidatura encabezada por Laia Estrada busca volver a ser un elemento clave en posibles pactos electorales. Eso sí, siempre y cuando sean de unidad soberanista, como ya han hecho saber durante la precampaña y con una línea roja a la extrema derecha. En 2021, facilitaron la investidura a Pere Aragonès y a pesar de que no dieran apoyo a los Presupuestos de los años siguientes, la duda es si la CUP podría ser nuevamente un elemento decisivo para investir de nuevo a Aragonès, o incluso a Carles Puigdemont, y reavivar la unión del movimiento independentista.
Pero, ¿cuáles son las principales propuestas de la CUP? La lista encabezada por Estrada promueve este 12-M como un momento de cambio para la ciudadanía. Los 'cupaires' sitúan la necesidad de abordar la emergencia climática, social y nacional en el centro de su programa electoral.
Para ello, proponen "desplegar" una 'Nova Economia Catalana'. Un proyecto político en el que la CUP, en caso de vencer en los comicios, propone una Renda Básica Universal, crear una empresa energética pública y abordar "la crisis habitacional".
La independencia se mantiene nuevamente como uno de los pilares del partido. Ellos mismos señalan que todas las propuestas económicas y sociales giran entorno a sentar las bases "para que el pueblo catalán se autodetermine y consiga la independencia política". Eso sí, Estrada es contraria a repetir la fórmula del referéndum tal y como ha propuesto ERC en las últimas semanas, ya que "sería volver 10 años atrás", explicó Estrada en La 2.
Tras las elecciones del 12M, los resultados de la CUP -por ahora los sondeos no auguran un repunte en su electorado- podrían abrir un nuevo escenario político en el que los 'cupaires' vuelvan a convertirse en protagonistas de pactos postelectorales con Junts o ERC para evitar (o provocar) una posible repetición electoral.
Comentarios