Genoveva Casanova (47 años) protagonizó en octubre pasado, a su pesar, uno de los momentos más controvertidos del entonces príncipe Federico de Dinamarca. Ambos fueron fotografiados juntos en Madrid, donde pasearon por el parque de El Retiro, cenaron y pernoctaron, concretamente en la casa de ella.
Genoveva abandonó poco después Madrid y se refugió en distintos lugares, tratando de huir de la polvareda que levantó ese material gráfico. También se alejó de las redes sociales.
Siete meses después, Genoveva Casanova, concursante de El desafío, ha vuelto a su vida normal, como ella misma demuestra. Volvió a ocupar su vivienda, un piso de alquiler en una zona costosa que paga su exmarido, Cayetano Martínez de Irujo, y a practicar running en El Retiro.
El mensaje que Genoveva adjunta con su vídeo, en el que sale corriendo a una velocidad moderada, es significativo: "Lo importante no es cuántas veces te caes, si no cuántas veces te vuelves a levantar… 4.5 kms en 35 minutos". Y ha concluido: "Progresa favorablemente".
Mientras Genoveva Casanova disfruta libremente de su vida corriente, los reyes Federico y Mary, que ascendieron al trono en enero pasado, están haciendo viajes oficiales, como a Suecia, y han disfrutado del barco real, el HDMY Dannebrog, en un viaje que además ha servido para inaugurar la temporada de navegación de vela danesa.
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