El primer ministro de Eslovaquia, Robert Fico, ha resultado herido este miércoles tras recibir cinco disparos al término de una reunión de su Gobierno celebrada en la ciudad de Handlova, en el centro del país. El mandatario ha sido intervenido de urgencia y al momento estaría fuera de peligro, según las declaraciones del viceprimer ministro del país. 

El viceprimer ministro de Eslovaquia, Tomas Taraba, ha salido a calmar al país y ha dicho que confía en que el primer ministro "sobrevivirá" al atentado. En declaraciones a la cadena británica BBC, Taraba ha afirmado que Fico ya no se encuentra en peligro de muerte tal y como señalaban las primeras informaciones.

"Me quedé muy conmocionado... afortunadamente, hasta donde yo sé, la operación salió bien, y supongo que al final sobrevivirá. No se encuentra en una situación que ponga en peligro su vida en este momento", ha declarado Taraba.

"Resultó gravemente herido: una bala le dio en el estómago y la segunda en la articulación; inmediatamente fue trasladado al hospital y luego a la operación", ha añadido el viceprimer ministro.

El ataque ocurrió cuando el dirigente, prorruso y cercano a las posiciones del Kremlin, conversaba con seguidores de su formación al terminar el encuentro. Sorpresivamente, un hombre se ha acercado a él disparándole hasta en cinco ocasiones. Esto le ha provocado heridas en brazos, piernas y abdomen, según el ministro del Interior eslovaco, Matúš Šutaj Eštok.

Instantes después de las detonaciones, Fico ha sido atendido rápidamente por sus hombres, que le han arrastrado hasta el coche oficial para ser llevado de urgencia a un centro hospitalario. Sin embargo, finalmente ha sido necesario un helicóptero para trasladarle hasta el hospital de Banská Bystrica, más cercano que el de Bratislava y a donde por carretera habría tardado mucho llegar, según ha explicado su oficina en un comunicado. 

Detenido un escritor de 71 años

Instantes después del suceso, la Policía ha acordonado la zona y ha sido detenido el autor del ataque. Este ha sido identificado como Juraj Cintula, un poeta amateur de 71 años, opositor al Gobierno y antiguo guardia de seguridad en un centro comercial, que portaba el arma de forma legal.  

El ministro del Interior, Sutaj Estok, ha comparecido en una rueda de prensa, donde ha detallado que investigarán "en detalle" todo lo ocurrido, exigiendo "una condena justa e inequívoca". También ha mencionado un "claro motivo político" para perpetrar el ataque, haciendo referencia a un vídeo publicado en redes donde el arrestado critica las políticas de Fico.

"Eslovaquia está viviendo el peor día de su democracia. Por primera vez en los 31 años de nuestra República democrática y soberana ha sucedido que alguien ha decidido expresar su opinión política, no en una votación, sino con un arma en la calle, y con la intención no de discutir, sino de eliminar físicamente a un oponente político", ha afirmado el titular de Defensa. Para el ministro, lo ocurrido es una "decepción terrible" tras el "esfuerzo de pertenecer al mundo civilizado" que "ha sido en vano".

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Eslovaquia, consternada

Escasos momentos después del ataque, las reacciones no se han hecho esperar. El vicepresidente del Parlamento eslovaco, Lubos Blaha, ha sido rotundo y ha cargado directamente contra la oposición al Gobierno. "Esto es vuestra culpa", ha espetado el miembro de Smer.

La presidenta del país, Zuzana Caputova, ha condenado enérgicamente el ataque y le ha deseado a su compañero una pronta recuperación. "Estoy en shock", ha manifestado la dirigente de ideología progresista. Por otro lado, el presidente electo, Peter Pellegrini, ha sido más contundente y en redes sociales ha lamentado que lo ocurrido "es una amenaza para todo lo que ha adornado hasta ahora la democracia eslovaca", y ha reconocido sentirse horrorizado por saber hasta dónde puede llevar "el odio" político.

"No tenemos que estar de acuerdo en todo, pero hay muchas maneras de expresar nuestro desacuerdo de manera democrática y legal", ha aseverado Pellegrini, quien en abril se hizo con la victoria en las elecciones presidenciales. "Un intento de asesinato es una amenaza sin precedentes para la democracia eslovaca. Ponemos en peligro todo lo que hemos construido juntos durante 31 años de soberanía eslovaca", ha añadido. 

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Por otro lado, el que fuera rival del presidente electo, el exministro de Exteriores Ivan Korkok, ha exigido una investigación exhaustiva de lo ocurrido, a la par que ha hecho un llamamiento a la "moderación" a la hora de lanzar declaraciones de responsabilidad o acusaciones.

Europa condena el ataque

Las reacciones de los máximos mandatarios internacionales tampoco han tardado en producirse. El primero en pronunciarse ha sido el primer ministro británico, Rishi Sunak, quien ha enviado sus condolencias a la familia de Fico. El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, también ha condenado lo sucedido calificando el ataque como "espantoso" y ha calificado a Eslovaquia de un estado vecino y "socio".

Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, ha expresado igualmente en redes sociales su repulsa: "Tales actos de violencia no tienen cabida en nuestra sociedad y socavan la democracia, nuestro bien común más preciado". El presidente de España, Pedro Sánchez, también se ha mostrado "horrorizado e indignado" y ha aseverado que "nada justifica la violencia". 

Rodeado de polémica

Fico juró a finales de octubre el cargo como primer ministro de Eslovaquia por cuarta ocasión tras su dimisión en 2018. Como consecuencia se produjeron una serie de protestas por el asesinato del periodista Jan Kuciak, que investigaba las actividades de la mafia italiana en el país.

Su nombramiento hace poco más de medio año estuvo rodeado de polémica y críticas por su postura prorrusa en plena invasión de Ucrania, cuando Fico aseguró que la nueva legislatura estaría marcada por una política exterior "soberana".