Madonna, denunciada por un fan que considera su último espectáculo demasiado sexual: "Es una frívola falta de respeto"

Quizás no se es tan fan de alguien si no se conoce la trayectoria del artista o la artista en cuestión. En el caso de Madonna, quien durante toda su carrera ha sido adalid de la provocación y el escándalo en la cultura pop y ha llevado la sexualidad por bandera, quejarse de que su último espectáculo contiene estos mismos elementos sea extraño. Pero para Justen Lipeles es una razón más que justificada para demandarla.

Este seguidor de la autora de canciones como Like a Virgin o Papa Don't Preach o de un libro titulado Sexo asistió el pasado mes de marzo al concierto que ofreció dentro de su gira Celebration en Inglewood, en el estado de California, y ha decidido interponer una demanda contra ella al considerar que el show fue demasiado sexual.

Según la denuncia que ha obtenido el portal de noticias Blast, Lipeles se ha quejado de que los espectadores se vieron "obligados a ver mujeres en topless en el escenario simulando realizar actos sexuales", lo que según este hombre se asemeja a someter a la audiencia a consumir "pornografía sin previo aviso".

"Obligar a quienes han comprado sus entradas a esperar durante horas en estadios, donde hace mucha calor y están incómodos, y someterlos a pornografía sin previo aviso es una demostración de la frívola falta de respeto de Madonna hacia sus fans", ha denunciado, si bien nadie más se ha unido a su denuncia por ahora.

Lipeles, además, añade que lo que le ha llevado a interponer la demanda no ha sido únicamente lo excesivamente sexualizado de las coreografías, sino el hecho de que apagase de manera deliberada el aire acondicionado del estadio —algo de lo que ya se habían quejado en otros conciertos de la gira—.

Eso provocó que tanto él como otros fans comenzasen a sudar de forma profusa e, incluso, en un momento dado se mareasen. Puntualiza Lipeles que, cuando le hicieron saber a la cantante que la temperatura estaba siendo insoportable, supuestamente le dijo a la multitud que se quitasen la ropa.

Por último, Lipeles, que en la denuncia también incluye a la promotora Live Nation en todos los delitos —incumplimiento de contrato escrito, tergiversación negligente, angustia emocional y publicidad engañosa—, finaliza diciendo que también fue engañado sobre la hora de inicio del espectáculo, pues se demoró casi hora y media y hubo partes en playback.

Estas dos últimas quejas no son las primeras de este estilo en la gira Celebration que está realizando la cantante, quien ha preferido no pronunciarse sobre esta demanda.