Cómo saber si somos un buen hogar para un hurón: "Son curiosos, cariñosos y juguetones, pero solo si sus necesidades están cubiertas"
- Los hurones son excelentes animales de compañía, siempre que conozcamos y cubramos todas sus necesidades.
- GALERÍA | Seis verdades sobre los hurones que no vemos en redes sociales.
Aunque muchas personas creen que los hurones fueron en algún momento de la historia animales salvajes, la realidad es muy diferente. Los hurones tal y como los conocemos han sido animales que siempre han estado bajo el cuidado humano, aunque no podemos decir lo mismo de sus antecesores, el turón (con el que se le suele confundir, debido a su parecido).
No obstante, seguimos conociendo poco sobre estos animales si lo comparamos con toda la información que tenemos sobre otras especies como los perros o los gatos y, en consecuencia, todavía hay mucho que nos queda por descubrir.
Por suerte, cada vez hay más estudios sobre su comportamiento, su alimentación y otros aspectos importantes a la hora de mantenerlos sanos y felices en nuestros hogares y, también, cada vez hay más expertos divulgando los nuevos conocimientos sobre ellos.
Un buen ejemplo en España es Isabel Peña, experta en nutrición y educación en hurones con más de trece años de experiencia y divulgadora a través de su cuenta Little Paws at Home, quién asegura que estos animales son ideales para convivir en los hogares siempre y cuando seamos conscientes de lo que son y de proporcionarles lo que necesitan.
Los hurones no son animales salvajes
"Los hurones son buenos animales de compañía pero solo para aquellas personas que son conscientes de lo que son y están dispuestos a atenderlos y teniendo una situación que así lo permita", defiende Peña. "Son curiosos, cariñosos, juguetones y divertidos, pero solo si sus necesidades están cubiertas".
La experta en estos animales insiste en esta idea porque le entristece escuchar comentarios de gente que convive con hurones y que se queja de que son animales que huelen mal, que destrozan el mobiliario o que muerden. "Esto solo ocurre si no están bien atendidos", asegura.
"Creemos en la falsa premisa de que los hurones son animales salvajes y la realidad es que no existen, los hurones salvajes son turones", explica Peña. "Si en algún momento vemos a un hurón salvaje en realidad estamos frente a un animal perdido o que alguna persona ha soltado pensando que sobrevivirá (y no es así)".
Los hurones llevan domesticados entre 2.000 y 3.000 años como animal para el control de plagas
De hecho, la experta en hurones detalla que existen diferencias físicas, comportamentales y sociales muy claras entre los hurones y los turones. "El tamaño, la musculatura, la forma de la cabeza e incluso la capa de color son distintas entre hurones y turones", enumera. "Los turones en un hogar se agobiarían mucho porque, de hecho, son animales solitarios y territoriales que solo se juntan en época de cría, mientras que los hurones disfrutan de la compañía de los suyos y conviven bien en grupos".
"Los hurones llevan domesticados entre 2.000 y 3.000 años, pudiendo haber sido los egipcios o los griegos quienes empezaron a tenerlo como animal para el control de plagas", expresa Peña. "No fue hasta la época de la Corte cuando se empezaron a utilizar como animales de compañía y los empezamos a encontrar en retratos".
Sabiendo todo esto, la pregunta que todo tutor de hurón (actual o futuro) debe hacerse es ¿cómo sé si somos una familia adecuada para estos animales? Peña tiene claros algunos puntos que todo tutor responsable debe cumplir a la hora de mantener hurones en casa: poder adquisitivo, tiempo y comunicación.
Todo buen tutor huronil debe contar con...
- Poder adquisitivo. Aunque pueda sonar injusto, la realidad es que para mantener a un hurón hay que contar con una buena economía ya que sus cuidados tanto a nivel de alimentación, veterinario y enriquecimiento ambiental son más caros que con otros animales de compañía. "Y no solo basta con tenerlo, también hay que estar dispuesto a invertir en ellos", expresa Peña.
- Tiempo. "Se piensa que el hurón es para personas que no tienen tiempo y la realidad es que es justo lo contrario", cuenta la experta en hurones. "Requieren de muchísima limpieza y enriquecimiento ambiental diario, por lo que ya solo en eso tendremos que emplear tiempo".
- Vínculo con el animal. Relacionado con el tiempo que invertimos en el bienestar del hurón, una buena familia para estos animales también deberá contar con tiempo para forjar una buena relación con sus peludos. "Después de limpiarles y de haber preparado sus actividades es importante también estar un ratito con ellos, en calma, acariciándoles y reforzando el vínculo con ellos", comenta la experta.
- Una buena comunicación. Otro punto importante para saber si somos el hogar adecuado para un hurón es conocer el lenguaje de estos animales. "Se comunican usando la boca y, aunque si está bien socializado no va a hacernos heridas, va a seguir utilizando la boca (y en ocasiones concretas como el celo o la adolescencia puede hacernos un poco de daño)", explica Peña. "Hay que estar dispuesto a esto".
- Conocimientos sobre su alimentación. Sobre la dieta de los hurones hay muchas opciones y se recomiendan muchas veces piensos específicos para estos animales. Sin embargo, la experta en nutrición recuerda que muchas veces no son adecuados. "Los hurones requieren de una alimentación muy específica que supone un desembolso, no basta con un pienso barato de supermercado", afirma. "Lo ideal es la comida natural o, de elegir un pienso, uno que contenga los nutrientes necesarios para su bienestar".