El líder de la oposición está dispuesto a usar "todas las herramientas" de las que dispone para frenar al Gobierno de Pedro Sánchez. Y una de estas es la moción de censura, la misma con la que el socialista llegó a la Moncloa en 2018 desbancando al popular Mariano Rajoy. Así lo ha reconocido el propio presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, quien se abre a aplicar esta medida tras las elecciones europeas del próximo domingo 9 de junio.

"Si esa mayoría social que no está de acuerdo con lo que está pasando en este ambiente de corrupción política y económica en la que se mueve España, en esta parálisis del Gobierno en el que llevamos casi un año, se convierte en mayoría electoral el 9 de junio, veremos más próximo el final del túnel". "¿Qué herramientas vamos a utilizar? Todas las que consideremos oportunas", ha respondido en una entrevista de Antena 3 en la que se le preguntaba precisamente por si se plantea la moción tras el 9J y si además contará con el apoyo de Junts: "Para eso hay que tener el contexto adecuado y pensar que puede ser útil en ese contexto", ha añadido sin descartar esta vía.

Una vía que, en cambio, descartó hace poco más de un mes cuando salió a comparecer después de que el presidente anunciara que se quedaba al frente de la Moncloa tras darse cinco días de reflexión. "Sé que no habrá elecciones a la mayor brevedad porque teme a las urnas. Aunque es lo que debería hacer porque para hacer un punto y aparte en política la única manera es consultar a los españoles. Sé también que no va a dimitir. A las pruebas me remito. Y adelanto que no le voy a presentar una moción de censura en estos momentos porque ha comprado el apoyo de sus socios con la dignidad de todos los españoles", aseguró el pasado 29 de abril desde la sede nacional de Génova.

De este modo, el líder del PP se muestra más flexible con respecto a hace un mes cuando se negó a adoptar esta vía. No obstante, tras la entrevista del líder, su equipo ha salido a negar que el hecho de que ahora no cierre esta puerta sea una novedad. "Noticia sería que el PP descartara una moción de censura en lo que queda de legislatura. Noticia sería que dijéramos que la promoveríamos. No ha pasado ni una cosa ni la otra, y no vamos a contribuir a informaciones basadas en el 'nodescartismo'. 

"Nuestro mensaje es claro: votar al PP el 9J acorta la Legislatura porque profundizaría en la debilidad electoral de Sánchez, que ya perdió las últimas elecciones municipales y generales, y agravaría su ya conocida debilidad parlamentaria. A más PP menos Sánchez. Pero nuestra vocación es hacerle caer en las urnas y en unas elecciones generales que son urgentes dada la precariedad del Gobierno. Ese, y no otro, es el camino escogido", sostienen fuentes del PP.

Además, han tratado de desmarcarse de Junts, ya que necesitarían de su apoyo para que saliera adelante la moción. "El PSOE intenta retener ahora voto crítico con la ley de amnistía deslizando que el PP pactaría con los cargos amnistiados por los socialistas [Junts]. Harían bien en seguir con su labor de destrozar electoralmente a Sumar. Intentar quitar voto al PP por nuestra supuesta connivencia con el independentismo es enternecedor".

Minutos antes y ante las cámaras, Feijóo se había mostrado reticente a avanzar la que será la estrategia de la oposición, más aún en la recta final de campaña. "No me gusta hacer una política ficción, quiero ser un político previsible y respetuoso con las instituciones", ha señalado. El líder de la oposición ha recordado la moción de censura con la que llegó Sánchez a la Moncloa en 2018 para poner en evidencia al nuevo Gobierno. Y es que "el que censuraba al Gobierno de Rajoy hace siete años" por corrupción, ahora "su entorno, su partido y su gobierno están siendo investigados en la Audiencia Nacional, en un juzgado y en la Fiscalía europea".

Para Feijóo, Sánchez debería tomar ejemplo de lo que defendía hace siete años: "No debería seguir en su puesto por la sospecha de corrupción en su entorno porque nadie se cree que el presidente no conociera las relaciones empresariales de su esposa. En la UE no sería posible tener un primer ministro en el que su mujer esté siendo investigada en un juzgado". Por su parte, ha asegurado que si lo que está ocurriendo al presidente del Gobierno le pasara a él, presentaría la dimisión de forma irrevocable: "Sería imposible que mi pareja utilizase el puesto en La Moncloa para levantar el teléfono y pedir dinero a una empresa pública. No vale todo, hay que volver a la decencia".