En una rueda de prensa durante la mañana de este jueves, el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, ha anunciado que España entrará a formar parte del procedimiento presentado por Sudáfrica contra Israel ante el Tribunal Internacional de Justicia (CIJ) por presunto genocidio en Gaza. El procedimiento comenzó en diciembre, cuando Sudáfrica presentó una denuncia contra Israel al haber detectado "un patrón de conducta genocida" en sus acciones.
"Hemos decidido dar este paso tras los acontecimientos de los últimos días en los que vemos que las medidas cautelares del Tribunal Internacional de Justicia se orillan completamente y están muy lejos de cumplirse", ha señalado Albares durante la rueda de prensa.
Sudáfrica, en su denuncia, invocaba "sus derechos y obligaciones" para "proteger a los palestinos de Gaza de la destrucción". Unos derechos y obligaciones ejercidos en el marco de la Convención de las Naciones Unidas para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio de 1948. Pero, ¿en qué consiste? ¿Qué establece dicha Convención?
Cuál es la función de la Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio
Como detallan desde las Naciones Unidas, la Convención establece que "los Estados pueden emprender acciones legales para impedir que se cometa un delito de genocidio". Así, obliga a los Estados que forman parte de dicha Convención a "adoptar medidas para prevenir y castigar el delito de genocidio".
Dicha obligación, como la prohibición del genocidio, son normas que se incluyen dentro del derecho internacional y que "son vinculantes a todos los Estados, estén o no entre los 153 países que han ratificado la Convención".
En este sentido, las medidas provisionales que se adopten en el Tribunal Internacional de Justicia (CIJ) son "jurídicamente vinculantes" y, además, tienen un potente poder simbólico. Sin embargo, recuerdan desde la ONU, es responsabilidad de los propios Estados "aplicar las decisiones del Tribunal".
Por qué se creó la Convención
La Convención fue aprobada en el año 1948 y consta de 19 artículos que recogen la siguiente consideración: "Considerando que la Asamblea General de las Naciones Unidas ha declarado que el genocidio es un delito de derecho internacional contrario al espíritu y a los fines de las Naciones Unidas y que el mundo civilizado condena, reconociendo que en todos los períodos de la historia el genocidio ha infligido grandes pérdidas a la humanidad, y convencidas de que para liberar a la humanidad de un flagelo tan odioso se necesita la cooperación internacional".
Consulta todos sus artículos: ¿qué se considera genocidio?
Todos los artículos ratificados de la Convención se pueden consultar en este enlace. En ellos se establecen las bases para definir qué se considera genocidio y cuáles pueden ser las consecuencias en caso de cometerlo. Así, el artículo I establece que el genocidio, ya sea cometido en tiempo de paz o de guerra, es un delito de derecho internacional.
¿Qué se entiende por genocidio? La Convención detalla que se considerarán "cualquiera de estos actos cometidos con la intención de destruir a un grupo nacional, étnico, racial o religioso: matanza de miembros del grupo, lesiones graves a la integridad física o mental, sometimiento intencional, o traslado por fuerza de niños".
El genocidio, detalla el artículo III, será castigado, así como la asociación para cometerlo, la instigación, la tentativa y la complicidad. Asimismo, indica el artículo V, las Partes vinculantes a esta Convención se comprometen a adoptar las medidas legislativas necesarias para aplicar estas disposiciones y establecer sanciones penales para castigar el genocidio.
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