Más allá de la pelea entre PP y PSOE, o las luchas entre Sumar y Podemos por la hegemonía a la izquierda de los socialistas, el gran triunfador de la noche es Alvise Pérez, el líder del partido Se Acabó la Fiesta, que irrumpe en el Parlamento Europeo con 3 escaños.
El partido fue fundado hace apenas unas semanas, a finales de abril, ex profeso para estos comicios europeos, pero aún queda por saber si esta formación tendrá mayor recorrido en el futuro.
Este domingo, el nuevo político se mostró claro en sus declaraciones. "Venimos a la política, no a hacernos millonarios como todos los demás, porque no estoy mirando un pisito en Galapagar", dijo.
"No, como sabéis, donamos el 100% del sueldo público, porque no somos malditos parásitos, tenemos trabajo, oficio y beneficio", agregó el activista, que ya es eurodiputado electo.
Pero, ¿quién es Alvise? ¿Qué dice su partido? Alvise Pérez es en realidad Luis Pérez Fernández (Alvise es la versión de Luis en el dialecto de Venecia), nacido en Sevilla en 1990. Estudió Ciencias Políticas y aún durante su etapa universitaria empezó a trabajar para el extinto UPyD como voluntario.
En 2012 se instaló en Reino Unido para trabajar en el Instituto Cervantes, y se afilió a los Liberal Democrats británicos. Cinco años después, se convirtió en jefe de gabinete del grupo de Ciudadanos en el Parlament de la Comunitat Valenciana, con Toni Cantó como portavoz. Dos años después, se desvinculó de los naranjas y se estableció como independiente.
Desde entonces, Alvise ha mantenido en redes sociales una actividad muy intensa en redes sociales, donde con frecuencia se le ha acusado de difundir bulos y noticias falsas, siempre con corte de ultraderecha. De hecho, Alvise se ha visto envuelto en procesos judiciales con varios políticos como Manuela Carmena, Óscar Puente, José Luis Ábalos, Salvador Illa o la periodista Ana Pastor.
Este año, Alvise ha dado el salto de las redes a la política con su partido Se Acabó la Fiesta. De perfil de ultraderecha, en realidad su programa político es muy difuso y llegan a plantear la posibilidad de la salida de España de la Unión Europea.
Alvise tiene como base comunicativa su cuenta de Telegram, donde suma más de medio millón de seguidores.
Es en esa y otras redes sociales, en las que se describe a sí mismo como "canal de noticias gratuito e independiente", donde ha ganado notoriedad: para sus seguidores, un acérrimo defensor de la verdad y de la lucha contra la corrupción política. Para sus detractores, un polémico propagador mediático de bulos y desinformaciones alineadas con el discurso populista de la ultraderecha; ataques de los que él mismo presume por 'incomodar' a la clase política y mediática.
En la campaña prometió luchar contra la corrupción y contra quienes califica de "calaña política y mediática", "provocar pánico y ansiedad a la clase política parásita" y "explicarle a Francia y Alemania que no somos las furcias de nadie" en Bruselas; y asegura que sorteará su salario entre sus seguidores para "no cobrar un solo euro público".
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