Llegan a España varias vaguadas cargadas de aire polar y lluvias con posible granizo: "Es llamativo este cambio tan brusco"

El paso de una nueva DANA ha dejado fuertes precipitaciones en toda España. Este lunes, nueve comunidades permanecen en alerta por tormentas, y la situación va a ir en aumento. Según relata el  meteorólogo de Meteored José Miguel Viñas, ya han llegado varias vaguadas cargadas de aire polar a la Península, que se mantendrán toda la semana dejando "lluvias bastante fuertes" en varias regiones del país. Habrá, asimismo, una bajada de hasta 10 ºC en las temperaturas. "Es llamativo este cambio tan brusco", resalta el experto a este medio. 

Las lenguas de aire frío seguirán afectando a toda la Península durante este martes, aunque tendrán especial incidencia en el este y en Baleares. Así lo afirma el portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), Rubén del Campo, que añade que se esperan lluvias muy intensas o incluso granizo en Cataluña, Aragón, Castilla-La Mancha, Andalucía Oriental y la Comunidad Valenciana. En esta última ya se ha activado el aviso naranja por precipitaciones. Mientras que en la provincia de Valencia se esperan 44 litros en una hora, en Alicante y Castellón -alerta amarilla- las lluvias acumularán más de 30 litros en una hora.

En Aragón, Comunidad de Madrid y las provincias de Ávila, Segovia y Salamanca también hay nivel amarillo por fuertes aguaceros y por lluvias de hasta 15 o 25 litros en una hora. A esta situación se unen Córdoba, Girona, Extremadura y Murcia, igualmente en alerta amarilla por tormentas. Según los meteorólogos, será a partir del miércoles cuando la vaguada vaya abandonando la Península, y las zonas del oeste tendrán una temperatura más estable. 

Las precipitaciones

Las tormentas de estos días dejarán de nuevo acumulados que localmente pasarán de los 60 a los 100 litros por metro cuadrado en aquellos lugares donde descarguen las más intensas y, puntualmente, pueden superar los 100 litros por metro cuadrado en el noreste de Cataluña. Esto podría provocar una subida de la reserva hídrica del país, que ha estado muchos meses en alerta por sequía. Los núcleos dejarán a su paso mucha actividad eléctrica.

Viñas, no obstante, prevé que la inestabilidad no se mantendrá durante toda la semana, ya que el jueves será un día transitorio, en el que habrá una subida de las temperaturas, si bien contará con algunos chaparrones residuales en el este y Baleares. Asimismo, entre el viernes y el sábado, una vez retirada la vaguada, llegará un frente que dejará tormentas aisladas, sobre todo en el extremo norte y en el este, aunque no es algo que alarme a los expertos.

De cara al fin de semana, los meteorólogos pronostican que a partir de la primera mitad del sábado "se abrirán grandes claros y subirán las temperaturas en el interior". El domingo, por su parte estará protagonizado por tiempo estable, con algunas precipitaciones en el noroeste. 

Temperaturas

En lo que respecta a las temperaturas, lo más llamativo son las anomalías del martes y el miércoles, cuando la llegada de la masa de aire más fría procedente del norte provocará que los termómetros estén 10 ºC por debajo de los registros medios de la época en varias zonas de la Península. "A este cambio tan brusco se le conoce como descenso extraordinario, precisamente porque no es lo habitual", destaca el portavoz de la Aemet, si bien recalca que en el norte sí es algo mucho más común. 

En la segunda parte de la semana, por el contrario, las temperaturas seguirán sin ser muy altas, aunque subirán progresivamente durante el fin de semana y alcanzarán en el interior peninsular "máximas de 27 o 28 grados". En el norte, no obstante, las máximas serán de 20 o 25 ºC. Viñas recalca que este cambio es "llamativo", y explica que hasta mediados de junio no entrará un calor general e intenso, aunque empezará a ser palpable la diferencia entre el clima del norte y el del sur. 

De cara al futuro, estas lenguas de aire frío no serán muy frecuentes durante los próximos meses, a pesar de que las vaguadas son algo "muy normal, al formar parte del ciclo de circulación atmosférico que se vive en España". Del Campo expresa, de hecho, que "lo más probable es que el resto del verano predominen las dorsales", un fenómeno que trae aire caliente. Así, según los pronósticos estacionales, las tormentas escasearán y las temperaturas serán altas, esperando un verano tórrido y cálido.